En la UCI y casi sin pulso. Así se encuentran actualmente los motores de dos tiempos con mezcla de aceite. Y lo cierto es que ni los mejores médicos podrán salvar su vida. Abocados a desaparecer en los próximos años, sobreviven poco más que en el offroad. Pero algunos se niegan a dejarlas morir y uno de ellos es la recientemente creada empresa británica Langen Motorcycles, con Chris Ratcliffe a la cabeza.

Esta marca británica aparecía en el mes de marzo pasado con una idea muy clara en la cabeza: crear una moto como las de antes pero con tecnología actual. Una moto en la que primase la sencillez, el bajo peso, la alta potencia específica y ese je ne sais quoi que tienen los motores de dos tiempos. Pero obviamente nadie en su sano juicio, hoy en día, se pondría a trabajar en un nuevo motor de dos tiempos desde cero.

Es por ello que Langen Motorcycles se ha asociado con Vins para usar sus motores. Sí, la empresa italiana que ha fabricado la Vins Duecinquanta de la que ya te hablamos en otra ocasión. Es por ello que tenemos muy claras las prestaciones que puede llegar a desarrollar partiendo del motor de dos cilindros en V a 90º (cotas de 54×54,5 mm) e inyección electrónica: 80 CV y 45 Nm a 11.700 vueltas y una banda de utilización situada entre las 9.500 y esas 11.700 rpm. Por debajo se engrasan las bujías así que habrá que sacar partido a la caja de cambios de seis velocidades tipo cassette (extraíble) y al embrague multidisco en seco. Interesante el doble escape, uno en el lateral y otro bajo el colín.

Si sois muy freaks como nosotros, puede que la apariencia de esta moto os resulta familiar. Y no es para menos ya que se parece enormemente a las CCM. Pero esto es debido a que Chris trabajó nada menos que 10 años con CCM, creando algunos de sus últimos modelos y por lo tanto, ha aplicado técnicas de diseño similares con el fin de trabajar sobre terreno conocido.

Así nos encontramos con un chasis tubular tipo trellis de aluminio en calidad aeroespacial, ligero y robusto que se usa también en el basculante. Llama la atención el sistema de suspensión trasero, con dos amortiguadores Ktech tipo piggyback (depósito separado) que recuerda al sistema usado en la Bimota Tesi H2. Delante encontramos una horquilla invertida Öhlins más convencional, con barras de 43 mm de sección y al igual que los amortiguadores, completamente regulables.

Como os imaginaréis es una moto tremendamente ligera, se habla de 112 kg, pero aun así han optado por montar unos descomunales discos de freno de 320 mm con pinzas radiales Brembo de cuatro pistones. Es probable que si no llevas la pantalla del casco cerrada, los ojos se te salgan disparados. Hay también otro disco trasero, también muy grande (265 mm en vez de un más tradicional 240 mm). Realmente nos sorprende porque quizás no era necesario irse a tamaños tan grandes y, así, disminuir las masas no suspendidas.

Aunque estamos seguros que las llantas de radios doradas serán muy ligeras (no llevan cámara). Sobre ellos se montan unos Dunlop Classic TT100 GP Radial, de aspecto retro pero rendimiento moderno, y con medidas 120/70 ZR17 y 150/60 ZR17.

Todo ello se adereza con una carrocería en fibra de carbono. Bueno, más que carrocería, paneles y que en contraste utiliza pan de oro de 24 kilates aplicado a mano. Sobra decir que cada moto se montará de forma artesanal (se calcula empezar a fabricarlas el año que viene) y los propietarios pueden ir a fábrica para que les hagan la moto a medida de sus necesidades. ¿Precio de la Langen Motorcycles? Sin especificar pero seguro que no se aleja mucho de los 35.000 euros.

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