Honda es una de las marcas que más está sufriendo este año y no hay duda de que todavía están muy alejados de sus posiciones habituales. Lo que es evidente es que en Honda están más perdidos que nunca y los resultados no llegan por mucho trabajo que hacen en mejorar su rendimiento. Los pilotos oficiales se quejan y por más que arriesguen no terminan de estar cómodos encima de la Honda RC213V, lo que hace que tomen más riesgos de los necesarios y no es para menos si se comprueba que no han traído grandes cambios en ningún sentido y siguen estancados en un pasado en el que no terminan de despuntar como se esperaba.
Desde el equipo Repsol Honda Team siguen buscando respuesta a los problemas que han tenido durante los últimos años, especialmente porque han caído al fondo de la clasificación general por más que hayan trabajado en esas áreas donde flaqueaban. En ese sentido, por más que hayan estado probando piezas en Japón, pocas novedades han sido las que han introducido, lo que ha hecho que muchos de sus pilotos hayan perdido la paciencia por completo. Tanto es así, que no es de extrañar que estén abatidos y con el ánimo bajo, especialmente por su aceptación de que este año poco o nada van a poder hacer sobre una moto que va mal y que está en las últimas posiciones.
Durante el pasado test que se celebró en el circuito de Mugello, Alberto Puig ha apuntado que es demasiado pronto para sacar conclusiones, pero están intentando encontrar el sendero del triunfo, algo que habían perdido desde el primer instante. Ahora bien, tendrán que seguir trabajando poco a poco, si lo que buscan es regresar a los puestos de cabeza el próximo año: “Todavía estamos buscando respuestas, pero también es cierto que estamos probando muchas piezas diferentes y probando muchas cosas”.
Uno de los principales problemas que se ha encontrado Honda no es otro que su marcada filosofía nipona les ha alejado de la realidad, por lo que no es de extrañar que tengan que cambiar su manera de trabajar de cara a la próxima temporada, llegando a europeizarse y no contar con políticas de funcionamiento interno que no les ha dado el resultado que esperaban. En ese sentido, no sería de extrañar que llegasen a apostar por integrar nuevas áreas de funcionamiento donde en el pasado eran la referencia.
Ahora, se ha comentado en abierto y público que están perdidos en todos los sentidos, llegando a probar piezas de configuraciones distintas, lo que ha hecho que hayan tenido que comprobar que el rendimiento final no sea el esperado: “Normalmente, cuando intentas muchas cosas es porque todavía no tienes una respuesta clara a tus problemas, por eso ves tantas especificaciones y piezas”, afirmaba Puig, que ha defendido los intereses de la firma nipona, especialmente en algunas áreas donde esperan recuperar las buenas sensaciones que tenían en el pasado tras perder el sendero del triunfo desde el 2020.
Alejandro Delgado
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