¿Qué es la Bultaco Brinco? ¿Se trata de una bicicleta eléctrica? ¿De un vehículo cuyas prestaciones podrían encuadrarlo como ciclomotor? ¿O puede llegar a ser incluso una motocicleta con todas las de la ley? Estas preguntas y muchas más fueron las que generó en 2014 nuestra protagonista de hoy. Un concepto muy versátil que animó la resurrección de la histórica casa catalana precisamente aquel mismo año, basándose en la idea de la motobike a fin de seducir nuevos compradores en nichos de mercado muy concretos.
Pero vayamos por partes. Y es que en verdad el concepto propuesto por la Bultaco Brinco no es tan novedoso. Eso sí, se le ha dado un giro de tuerca bastante importante a cuestiones que ya existían en el motociclismo desde hacía décadas. Veamos. Para empezar, la relación entre las bicicletas y los ciclomotores no es en absoluto extraña. Lejos de ello, sólo hay que remitirse a los años cuarenta y cincuenta para contemplar la amplísima industria basada en la motorización de bicicletas. Una senda industrial por la que comenzaron marcas hoy en día tan inapelables como Honda o Ducati.
Eso sí, a diferencia de la Bultaco Brinco aquella opción se dirigió al mercado masivo, marcado por el empobrecimiento propio de los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial. Un mundo donde las más de las familias no podían permitirse el acceso a los automóviles, teniendo que ir de forma descubierta sobre el equilibrio de las dos ruedas hasta que modelos como el SEAT 600 facilitaron el acceso a un transporte más cómodo y familiar. Lejos de aquellas situaciones precarias, la Bultaco Brinco no es un mixto entre bicicleta y motocicleta por precio. De hecho éste fue bastante elevado, dirigiéndose a un nicho de mercado muy exclusivo marcado por el uso lúdico.
A medio camino entre una bicicleta eléctrica y una motocicleta, esta montura es una opción perfecta para disfrutar del ocio en rutas de campo
Bultaco Brinco, una motobike de nuevo cuño
Después de ver lo diferentes que son las motivaciones actuales en lo que se refiere a mezclar bicicletas y motocicletas respecto a las que regían en los años cuarenta, no queda más que explicar el concepto de motobike. Así las cosas, a estos vehículos se les puede entender como una especie de bicicleta eléctrica sin las restricciones de velocidad – 25 kilómetros por hora – que la ley impone. Algo polémico, pues dejaba a la Bultaco Brinco sin posibilidad de ser homologada ya que alcanzaba 60 kilómetros por hora.
Un dato que la catapultaría directamente a ser una motocicleta como tal, siquiera un ciclomotor. De esta manera, los primeros meses de la Bultaco Brinco transcurrieron ofreciéndose como un vehículo privado a usar en campos o fincas donde no se tuvieran que atender las leyes de tráfico. No obstante, de cara al 2016 se ofreció un kit de homologación para caparla en 45 kilómetros por hora.
Llegados a este punto, a la Bultaco Brinco se la podía dar permiso de ciclomotor. Eso sí, al tener pedales podrías utilizarla como una bicicleta eléctrica, moviendo con su ayuda los 33 kilos de peso con 100 kilómetros de autonomía si se ayuda con el pedaleo o 30 si se va en exclusivo modo eléctrico.
Cuando se estrenó siquiera tenía la posibilidad de ser homologada, lo cual se remedió al año siguiente realizando ajustes en la velocidad para que pueda registrase como ciclomotor
La potencia dada por la Bultaco Brinco es de 3 Kw, con un par de 60 Nm. En suma, un modelo dirigido a aquellas personas que estén buscando algo que aún a día de hoy sigue siendo difícil de clasificar, aunque está claro que puede ser de lo más agradable y ventajoso en la realización de largas rutas de ocio donde combinar sendero, pista de tierra y eventualmente carretera. Sin duda un diseño atrevido y llamativo con el que se animó el resurgir de Bultaco en pleno siglo XXI.
Miguel Sánchez
Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.No era nada, era una operación de marketing que algunos parece que han olvidado. Estáis obviando que fue un fracaso, no era un vehículo utilizable, por nadie, era un timo, una estafa, que acabó en los tribunales y esos mismos administradores taparon la operación a base de dinero. Posteriormente todo acabó con una suspensión de pagos salvaje, todo por uno gestores que no tenían ni idea de lo que es la industria, ni la decencia.