La Harley-Davidson XL883R Sportster era otra de las formas de entender la deportividad por parte de la firma yankee. Por un lado, estaba la XR1200 y en el lado contrario, la XL883R, cada una con su idiosincrasia y sus peculiaridades. De hecho, la XL883R Sporster presumía de una deportividad inspirada en la Harley-Davidson XR de flat-track, pero no hay había muchos cambios técnicos como si ocurría con la XR1200.

Harley-Davidson y la deportividad siempre han tenido una relación un tanto peculiar. La firma norteamericana ha salido pocas veces de su zona de confort y por lo general, nunca ha obtenido grandes resultados con el experimento, aunque eso no quiere decir que hayan sido malas decisiones. Los usuarios de Harley y del mundo custom en general, nunca han estado abiertos a ese tipo de motocicletas y eso, en aparte, ha sido uno de los problemas que ha tenido la compañía.

Con la XR883R buscaban ofrecer un estilo y unas aspiraciones deportivas, pero sin salirse del mundo custom básico de toda Harley. Ese se notaba, claramente, con solo echarle un vistazo a la moto, sin entrar en detalles o datos técnicos. A simple vista, la XR883R es una Harley-Davidson Sporster con una decoración específica y unas llantas de aleación con 17 radios. Y en el fondo, así era, una Sporster con una imagen más agresiva, que se basaba en el estilo de carreras de la marca. Copiaba la decoración de las máquinas de competición de Harley: color base naranja con detalles en contraste de color negro –también se ofreció con otras decoraciones en las que se cambiaba el naranja por el negro o el gris–, motor, pinzas de freno, botellas de la horquilla, tapa del filtro y otra serie de cosas acabadas en negro mate, reducción de cromados –aunque seguía teniendo bastantes–… Los frenos, delanteros, no obstante, si eran más grandes y efectivos que en cualquier otra Sporster.

El motor era el Evolution, un V2 de 883 centímetros cúbicos refrigerado por aire y alimentado por carburadores, capaz de rendir 53 CV a 6.000 revoluciones, combinado con un cambio de cinco relaciones, la característica correa dentada de Harley-Davidson para la transmisión secundaria y una línea de escape más corta y con un sonido más deportivo –deportividad estilo Harley, ya sabéis–.

Según revistas como Ultimate Motorcycling –norteamericana–, la Harley-Davidson XL883R Sporster era una moto con una conducción muy suave, con un manejo sencillo y cómodo en carreteras de segundo orden a velocidades de crucero. No era una moto para una conducción deportiva e incluso se valoraba que los escapes tuvieran una posición baja para poder instalar unas alforjas, lo que deja claro la visión de una Harley deportiva que se tiene en Estados Unidos.

Aquí en Europa se criticó el peso, superior a los 250 kilos, y la capacidad de tumbar en las curvas, lo que limitaba el disfrute en determinadas carreteras y lo enfocabaa otro tipo de conducción, lejos de aspiraciones deportivas.