Parece que llevamos toda la vida con carreras dominadas por los motores de cuatro tiempos, y algo de lógica hay, pues han pasado nada menos que más 20 años desde que cambió la normativa y los motores “dos tiempos” se vieron contra las cuerdas. Era el año 2002, las MotoGP se hacían realidad y las míticas e histéricas 500 “de agujeros” fueron doblegadas sin compasión. Y entre todas las competidoras, había una moto que destacaba por encima de todas: la Honda RC211V.
Cuando se anunció el cambió de normativa y la entrada de los “cuatro tiempos”, parecía que todo había sido diseñado para que Honda se luciera y demostrara su capacidad técnica con una máquina soberbia y casi sin rival. La firma japonesa, el rival a batir, exprimió el reglamento hasta el límite y desarrollo una moto espectacular, con uno de los motores más interesantes de la historia de las carreras, sin olvidar –nunca lo haremos–, el motor de pistones ovales. Y lo era, porque Honda fue la única marca que apostó por un motor de cinco cilindros en V.
La Honda RC211V contaba con el primer V5 en la historia de las carreras de motos, cuya configuración colocaba tres cilindros en la bancada frontal y dos en la trasera, con ángulo de 75,5 grados, lo que permitía eliminar las vibraciones provocadas por una distribución de cilindros desigual. Con 990 centímetros cúbicos, era capaz de superar los 210 CV a 14.000 revoluciones, aunque nunca se confirmó la cifra oficial de potencia, algo bastante común cuando se trata de motores de competición. No se pueden dar pistas a los rivales, ya sabéis… No obstante, se decía que la potencia de aquel V5 de Honda rondaba los 230 CV en sus primeras carreras, una notable ganancia con respecto a los 500 “2T”, que rondaban los 200 CV, aunque donde realmente destacaban era en la cifra de par.
Entre las filigranas que desarrolló Honda para su RC211V, estaba un sistema de control de las válvulas de admisión, diseñado para gestionar el freno motor. Los motores “4T”, al contrario que los “dos tiempos”, ofrecían muchísima retención en frenadas, equivalente a unos 30 CV sobre la rueda trasera, lo que podía provocar toda serie de problemas. Por supuesto, la electrónica fue uno de los elementos determinantes para la creación de semejante motor, la estrella indiscutible de la Honda RC211V.
La primera aparición de la RC211V en 2002, supuso la primera victoria y desde entonces, pocos lograron detenerla. Honda ganó 14 de 16 carreras y se hizo con el título de constructores y Valentino Rossi, su piloto estrella, con el Campeonato del Mundo de pilotos, el primer campeonato de MotoGP.
Javi Martín
Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.COMENTARIOS