Ahora que estamos en plena transición a la movilidad eléctrica no dejamos de ver nuevas marcas y proyectos relacionados con ella. Algo en cierta medida parecido a la primera época del motociclismo hace más de un siglo, con multitud de ingenieros independientes trabajando a través de pequeñas empresas que iban desapareciendo, fundiéndose o creciendo para escribir así el desarrollo de la historia industrial de la motocicleta. No obstante, aún sigue siendo muy reducido el número de estas empresas cuya sede no se encuentre en algún país de raíz anglosajona. Una corriente en la cual parece ser una excepción la madrileña OX Motorcycles, la cual acaba de presentar su OX One.

Primera creación de la marca. A la cual ya pudimos seguir la pista hace meses con la presentación de su último y más afinado prototipo, habiendo seguido la posibilidad de adquirir su motocicleta eléctrica a partir del inicio del inminente 2022. Y lo cierto es que suena interesante, partiendo de una estética café racer que procura dar una pátina de diseño retro a lo que en verdad esconde innovaciones como sus baterías, el sistema de conectividad o los sensores que avisan al conductor de cualquier incidencia en el entorno.

Otra muestra más sobre cómo asentarse en la nostalgia del pasado va a ser moneda común en la transición hacia escenarios futuros, compartiendo planteamiento con otras eléctricas retro como la neozalendesa Switch. Eso sí, aportando interesantes soluciones a la movilidad urbana, ya que con sus 100 kilómetros de autonomía la OX One adquiere el carácter de una montura ágil y llena de encanto para desplazamientos diarios por el centro de una ciudad e incursiones a su área metropolitana. Además, prueba de esta personalidad práctica para el día a día son las múltiples posibilidades de interacción a través de una aplicación con la que gestionar cada unidad.

OX Motorcycles es una empresa que actúa desde Madrid ofreciendo con este modelo su primera solución de movilidad urbana con una marcada estética retro

OX One, conectividad y seguridad para el día a día

En lo referido a sus prestaciones, la OX One desprende una potencia nominal de 6 kW, pudiendo alcanzar picos de hasta 12 kW. Eso nos da la pista de una buena capacidad de aceleración cuando así se le exija, siendo éste uno de los puntos más interesantes en cualquier vehículo eléctrico gracias a su facilidad para entregar de inmediato una gran cantidad de energía. Tanto que, en lo referido a la velocidad máxima, ésta se ha limitado a los 110 km/hora.

Rendimiento que se gestiona en parte gracias a un avanzado sistema de frenado, el cual es capaz de regular la presión de frenada en cada rueda para lograr así una parada más secuenciada y en menos metros. Una de las principales aplicaciones de la informática a la seguridad en la OX One, la cual también se beneficia de unos sensores capaces de avisar sobre cualquier vehículo que se acerque a una velocidad anómala. Todo ello a través de la aplicación Elisa. Nombre con el cual la marca ha bautizado al programa con el cual gestionar la motocicleta a través del móvil.

Un servicio que ofrece múltiples estadísticas e informaciones útiles para el trayecto, aumentando la conectividad entre máquina y usuario para afinar así el uso diario de la OX One. En lo referido al apartado de baterías, cuenta con una sola de unos 25 kilos. Fácilmente extraíble para poder ser cargada en cualquier enchufe casero en el plazo de cuatro a seis horas. Coordenadas que permiten un cómodo uso diario siempre y cuando se tenga la lógica atención a realizar la carga en el momento que nos lo recuerde la aplicación Elisa.

La conectividad es uno de los puntos fuertes de la OX One, la cual además utiliza la tecnología digital para mejorar su respuesta de frenado

Otro más de los atributos digitales de la OX One, ofreciéndose en múltiples acabados para personalizar así lo que en verdad es un vehículo puntero en varios campos que serán clave en un futuro inmediato: conectividad, electrificación y movilidad urbana. Por de pronto ya se puede encargar siendo la página web de la empresa la referencia para la compra. Una más entre las características de esta era digital en la que los fabricantes consolidados tendrán que reinventar muchos aspectos comerciales y los nuevos ser audaces para lograr posicionarse.