Moto del día: Honda Beat FC50

Moto del día: Honda Beat FC50

Un scooter con diseño futurista


Tiempo de lectura: 2 min.

Si hablamos del Honda Beat, a muchos de nosotros nos puede venir a la mente ese kei-car descapotable biplaza tan cuqui que Honda lanzó en 1991. Aunque en realidad, ese nombre ya lo habían usado en 1983 en un scooter, el Honda Beat o también llamado Honda FC50.

En cuanto a concepción mecánica, era relativamente sencillo, aunque con alguna innovación. Es un monocilíndrico de 48 cm3 y dos tiempos refrigerado por líquido, con un pequeño radiador en su parte frontal. Esto hacía que fuese de los más potentes de su categoría, logrando unos suficientes 7,2 CV. Poseía una caja de variador continuo, que engranaba la alta sobre las 5.500 rpm.

La innovación provenía de su sistema V-TACS -Variable Torque Amplification Chamber System-. Poseía un pedal en su parte izquierda, que se podía pulsar con el talón y que activaba el sistema V-TACS. No era más que una válvula situada en el escape que cuando se cerraba, ofrecía mayor potencia en el rango alto del cuentavueltas. En este caso, era recomendable operarlo a partir de 5.500 rpm, ya que por debajo lo que conseguía era el efecto contrario, disminuir la potencia. Es curioso que fuese manual, ya que otros fabricantes recurren a un servo para operar la válvula.

Debía tener su encanto presionar el pedal del V-TACS y sentir como la moto ganaba potencia

La parte ciclo era muy modesta, pero suficiente para el carácter de esta moto: doble horquilla delantera, con monobrazo trasero y frenos de tambor en ambos ejes. Con sus 60 kg de peso en seco, conseguía alcanzar los 60 km/h a 11.000 vueltas, su régimen máximo.

Pero tal vez lo más característico de la Honda Beat era su diseño. Intentando emular a un coche, su frontal tenía una pequeña parrilla donde se situaba el radiador, flanqueada por dos faros cuadrados. No solo era esto lo peculiar, esta parrilla y faros era bastante prominente, saliendo por encima de la rueda delantera a modo de nariz. El resto del diseño era más convencional, con el suelo típico de los scooters y su asiento grande, aunque solamente estaba diseñada para llevar a una persona.

Se comercializó únicamente en Japón durante el año 1983 y la podías conseguir en rojo, blanco o negro. El mercado japonés es muy competitivo y el diseño era muy polarizante, así que las escasas ventas de este pequeño scooter no justificaban su continuidad, cesando su producción al año siguiente.

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Sobre mí

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches, y ahora también las motos. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

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Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.

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