La Harley-Davidson Sportster es el modelo más deportivo, por así decirlo, de la compañía de Milwaukee. De hecho, la denominación de Sportster es una combinación de la palabra Sport y la palabra roadster y para más inri, nació casi al final de los 50 para plantar batalla a las roadster británicas que comenzaban a poblar las carreteras de Estados Unidos.
Con esos datos, uno se puede imaginar que se trata el modelo más longevo de Harley-Davidson y no parece que vayamos a ver como dice adiós. Esa longevidad, esa larga vida comercial, ha sido uno de los motivos por los cuales, la Sportster ha contado con infinidad de versiones, cada una con una marcada personalidad, pero siempre sin abandonar la auténtica esencia del modelo.
Imagen minimalista, asiento monoplaza, inspiración en la viena escuela… la Sportster Iron irradia personalidad y estilo old school
Entre esas versiones, hay algunas como la Harley Sportster Iron 883, que destacan por la pureza de su concepto.Las custom en general, y Harley-Davidson en particular, siempre han sido famosas por tener unas notables vibraciones, unos frenos que no están pensados para altas velocidades, una postura de conducción cómoda y pensada para grandes tiradas de kilómetros –si no se customiza de forma extrema, como pasa en ocasiones– y un sonido de motor atronador. Cosas que se llevaron a un nuevo estadio con la Sportster Iron.
La imagen de la Sporster, uno de los mayores reclamos de toda custom, combina lo compacto de toda la saga, con un minimalismo inspirado en las motos de finales de los años 50 y en el mundo del cafe racer, de forma que se logra una moto con una personalidad espectacular. Sin embargo, no debemos olvidar que se trata de una Harley, y las altas velocidades no son lo suyo, le gusta más pasear al ritmo de sus pistonadas al tiempo que se escucha –y se siente– el trabajo del propulsor.
El asiento monoplaza, el manillar “drag strip” de la vieja escuela, los colores elegidos… la Sportster Iron mostraba claramente una inspiración en el concepto bobber, pero sin llegar a entrar en dicho segmento, donde todo lo superfluo –incluso guardabarros– se elimina en pos del estilo y del comportamiento.
Sin embargo, como curiosidad, el motor 883 Evolution se anclaba mediante silent blocks al chasis, detalle que reducía notablemente las vibraciones y que se combinaba con otros elementos más tradicionales, como la horquilla con fuelles de goma o un amortiguador trasero recortado.
Un detalle muy característico de Harley, el peso, se mantenía en la Sportster Iron 883, a pesar de su sencillez y su equipamiento espartano. En báscula marcaba nada menos que 256 kilos, una cifra que, no obstante, está motivada porque la firma yankee no usa plástico en sus motos, solo acero…
Javi Martín
Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.COMENTARIOS