Es posible que te llegue a sorprender, pero en Yamaha siguen haciendo historia para conquistar el mercado. Bien es cierto, que la fábrica de los diapasones ha tenido que replantearse durante mucho tiempo los pasos a seguir durante este tiempo, y en ese sentido quisieron ir varios pasos por delante, apostando por renovar la Yamaha FJR1300ES, una moto que parece que es digna para su último respiro, todo ello con la intención de asegurarse su reinado en el segmento de las motos de tipo turismo, pero con un marcado carácter deportivo.

Sí, es bastante probable que tenga algo que ver con su hermana ADV, la Tracer 9GT+, pero eso no impide que sea una de las más musculosas y agresivas a simple vista que se recuerda. En la firma de Iwata se han propuesto hacer motos que les lleven al éxito, que los usuarios tengan ganas de utilizar y sobre todo disfrutar, eso sí, sin que se quede en el olvido el hecho de que no son motos dignas de quedarse cogiendo polvo en un escaparate o bien en un garaje en el mejor de los casos. Dicho de otro modo, Yamaha quiere vender motos como sea y en un momento como el actual, donde se busca más la usabilidad que la deportividad, aspecto donde brilla con luz propia o eso puede llegar a parecer en una primera impresión.

En líneas generales, vemos que es una moto polivalente, pensada, según dicen algunos, para esos desplazamientos cortos (que bajo nuestro parecer es una absurdez, especialmente si se tiene en consideración que para moverte por las grandes ciudades es mejor un scooter), o bien para hacer esos grandes recorridos que forman parte de las rutas del fin de semana, que es realmente donde la FJR1300 se siente más a gusto, caracterizándose especialmente por ser una máquina “de machaque”, de uso continuado y de sacar todo ese rendimiento que oculta. Eso sí, lamentablemente para todos los fieles a la firma japonesa en Europa, este modelo no puede comercializarse por no cumplir con la normativa Euro5.

La Yamaha FRJ1300, como su nombre indica, apuesta por un motor de cuatro cilindros en línea de 1.298 cc, ofreciendo una potencia notoria, aunque su entrega es suave y sin agresividades. Con 146 CV y 138 Nm de par motor, lo que le hace que pueda llegar a competir cuerpo a cuerpo con la mismísima Suzuki GSX-S1000GT. Todo esto se consigue con un nuevo motor que han querido reinterpretarse con un tamaño más condensado y equilibrado, especialmente en su interior, donde tiene unos nuevos pistones forjados livianos que cuenta con bielas carburadas de gran resistencia y durabilidad, o eso es lo que nos intentan vender desde la marca. 

En Yamaha saben que los usuarios no van a tenerla de decoración, y es algo lógico, este tipo de moto es para utilizar de manera continuada y sacarle partido. Para que no sufran esos componentes, cuenta con un nuevo embrague antirrebote, el cual garantiza que las reducciones de marcha sean más suaves, algo lógico si se tiene en cuenta que tiene una caja de cambios de seis marchas. A todo ello, se complementa con un uso avanzado de la tecnología, introduciendo un completo software de gestión de la potencia, donde podrás jugar con la entrega de potencia suave del motor o bien buscando el pleno rendimiento de la moto. 

Al mismo tiempo, en la marca han sido conscientes de que los usuarios necesitarían una gran capacidad de adaptación a las distintas situaciones en las que se pueden encontrar. En ese sentido, han apostado por integrar un sistema de suspensión ajustable de manera electrónica, el cual permite que se pueda readaptar según las necesidades, lo que hace que sea una moto de gran cilindrada y una notoria polivalencia.

En sus más de 20 años de existencia, la Yamaha FJR1300ES está dando su último suspiro y lo hace con una moto que ha sabido resurgir por completo de sus cenizas, apostando por nuevos elementos que harán que tenga un importante carácter aerodinámico, el cual se complementa con la última tecnología del mercado, lo que hace que sea una de las motos más avanzadas dentro de su segmento. Sin embargo, el gran secreto de su éxito, más allá de su potencia o bien corpulencia, se encuentra en los componentes que forman esta moto, los cuales han sido específicamente desarrollados para esta moto, lo que hace que sea una de las motos más resistentes hasta la fecha.