Los ex-Confederate se han animado con la propulsión eléctrica, y después de mostrar su primera creación, la Curtiss Zeus, y tentarnos con un prototipo llamado Curtiss Hera, ahora nos traen al Dios griego del inframundo sobre dos ruedas. La tercera moto eléctrica de los americanos se llama Curtiss Hades.
Lo primero que llama la atención es su diseño tan rompedor como minimalista, obra de JT Nesbit. Entre las dos ruedas vemos una especie de misil con aletas disipadoras de calor que llama poderosamente la atención. Aquí se aloja su batería de 16,8 kWh que funciona a 399 V y que proporciona energía a su motor eléctrico de flujo axial que produce 220 CV y 200 Nm de par.
El inversor que se encarga de transformar la corriente continua de la batería en alterna para suministrar al motor es un Cascadia Motion PM100
El chasis de la moto es tubular de 1,75 pulgadas -44 mm-, soldado a mano en titanio o cromo-molibdeno, unido a su aluminio 6061 bellamente mecanizado. La suspensión delantera conserva el tradicional esquema de Confederate, con la suspensión girder, que no es más que un paralelogramo deformable de aluminio en la parte superior de la horquilla, montando un único amortiguador RaceTech, ajustable en compresión y rebote, con 6 pulgadas -152 mm- de recorrido.
Para la suspensión trasera recurre a un monobrazo también de aluminio, con monoamortiguador RaceTech con dos velocidades de compresión y rebote, y mismo recorrido que el delantero, pero en configuración push-rod, ubicándolo justo encima de la batería y dejándolo a la vista.
Para los frenos recurre a Beringer, con cuádruple disco delantero de 230 mm con pinzas de cuatro pistones, mientras en la trasera monta doble disco de 230 mm y pinza de doble pistón de la misma marca. Algo innovador es que las llantas son de fibra de carbono, de medidas 110/80 R18 al frente y 160/60 R18 en la parte de atrás. Algo curioso es que para accionar su freno trasero no hay pedal: se sitúa en la maneta izquierda, por lo que el control y dosificación de la frenada es mayor.
La iluminación es otra parte del diseño que Curtiss ha trabajado mucho: la luz frontal recuerda mucho a las enmascaradas de la Segunda Guerra Mundial, mientras las luces traseras se sitúan bajo el asiento
En cuanto a dimensiones, tiene una batalla de 1.574 mm, una distancia libre al suelo de 241 mm y una altura del asiento de 698 mm.
Si te ha gustado la Curtiss Hades, todavía deberás esperar. La producción está previsto que comience en 2020 y su precio no será barato precisamente: partirá de los 75.000 dólares americanos, unos 68.000 euros sin impuestos o transporte. Eso sí, a cambio te llevas una moto única, aunque sea eléctrica.
Pablo Mayo
Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches, y ahora también las motos. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.COMENTARIOS