La Harley-Davidson JDCA/B Experimental Racer, se podría considerar un prototipo de competición de la firma norteamericana, que ponía de nuevo en pista una configuración de motor que ya se usó en 1914, con la primera motocicleta de carreras de la marca, y que se retiró después de algunos éxitos. De hecho, ese primer motor de 1914, permitió establecer algunos récords de velocidad, como rodar a 89,1 mph –casi 96 km/h– durante 100 millas –160 kilómetros–.
Desde ese momento, a esos motores se les conoció como “Chicago”. Sus características destacaban por la posición de la bujía, que se ubicaban sobre la cámara de combustión y muy cerca del puerto de escape. Era un diseño experimental que demostró ser muy válido para pista porque desarrollaba mucha potencia, pero tenía ciertos inconvenientes en cuanto a su longevidad, lo que conllevó su retirada de las carreras.
No obstante, diez años después, se vio al señor William S.Harley a lomos de un prototipo de carreras con motor Chicago. Hoy día no se sabe que prototipo era aquel, pero la Harley-Davidson JDCA/B Experimental Racer es un ejemplo de como la firma yankee experimentaba con esos propulsores. De hecho, se cree que se trata de un ejemplar único con motor Chicago y fue minuciosamente restaurada. Incluso se tuvieron que fabricar componentes de forma artesanal porque, obviamente, no había repuestos oficiales.
La Harley JDCA/B empleaba el motor como elemento portante –en un chasis “keystone” de batalla corta–, detalle que parece ser bastante común en aquellos años, mientras que se recurría a manillares y horquilla Flying Merkel, que era lo mejor que se podía conseguir en la época. No tenía frenos, como todas las motos de competición de los primeros compases del Siglo XX, el piloto tenía que confiar, únicamente, en un interruptor de apagado y en la propia compresión del motor para reducir la velocidad, que por lo general, era superior a las 100 millas/hora –unos 160 km/h–.
El motor Chicago de la Harley JDCA/B Experimental Racer, estaba diseñado para funcionar con alcohol, que arde a menor temperatura que la gasolina y prolongaba la vida útil de las bujías, el principal problema que tenía la configuración con las bujías en lo alto de la cámara de combustión y cerca de la válvula de escape –lo ideal sería que estuviera en el centro–. El empleo de alcohol obligaba, por otra parte, a tener dos sistemas de lubricación, pues el alcohol podía atravesar la delgada película que creaba el aceite para lubricar.
Harley-Davidson se convirtió en el mejor equipo de carreras de la década de los 20, solo necesitó seis años para conseguirlo –empezaron a competir en 1914– y se permitían el lujo de probar diferentes soluciones como el motor Chicago, que nunca llegó a las motos de producción.
La Harley JDCA/B Experimental Racer de la imagen, fue subastada por Mecum Auctions en agosto de 2021.
Javi Martín
Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.COMENTARIOS