Moto del día: Honda Motocompacto

Moto del día: Honda Motocompacto

Sucesora del concepto presentado en los ochenta por la Motocompo, la Motocompacto es una "última milla" electrificada y adaptada al futuro que está cada vez más cerca.


Tiempo de lectura: 4 min.

Por su geografía accidentada y crecimiento demográfico, las ciudades japonesas empezaron a registrar serios problemas de movilidad justo después de la Segunda Guerra Mundial. Y es que, no en vano, la mayor parte de la población se hacinaba -y hacina- en ellas viviendo no precisamente cerca de sus puestos de trabajo. Es más, desde los años cincuenta en adelante, más aún según se intensificaba el crecimiento del sector servicios, la dicotomía entre centro urbano -con una alta densidad de oficinas- y periferia residencial se acrecentaba para provocar atascos diarios en los accesos a la ciudad.

Así las cosas, en aquel Japón dominado por los vehículos con tamaño reducido -perfectos tanto por espacio de aparcamiento como por economía de recursos- se empezó a pensar en los llamados “vehículos de última milla”. Nacido en el ámbito del transporte de mercancías, este concepto se enfoca en el diseño y fabricación de pequeños modelos con los que sortear de manera rápida y efectiva el cada vez más denso tráfico urbano. Y sí, lo cierto es que aquello tuvo un gran éxito con la popularización de unos vehículos a los que bien podríamos llamar “micronetas”.

Ahora, con la llegada de los años ochenta algunos fabricantes vieron un buen nicho de negocio en ofrecer “vehículos de última milla” enfocados a la movilidad personal. Llegados a este punto, el que más destacó fue Honda gracias a su Motocompo. Una especie de ciclomotor plegable que, con su motor de dos tiempos y 50 centímetros cúbicos, podía adquirirse en paquete junto a un Jazz. Y es que, al fin y al cabo, la Motocompo se ideó para encajar a la perfección en su maletero. Todo ello con la idea de transportarse al centro de la ciudad en automóvil y, una vez aparcado éste en alguno de los grandes aparcamientos situados en sus accesos, moverse por la red urbana ya sobre aquel pequeño ciclomotor.

Dada la geografía de Japón la mayor parte de la población se ha concentrado en ciudades cada vez más atestadas de tráfico; un contexto donde este tipo de vehículos cobran todo el sentido

Honda Motocompacto, la actualización de una vieja idea

Aunque el plan relativo a la suma de la Motocompo y el Jazz parecía estar llamado al éxito, lo cierto es que la realidad fue bien distinta. Es más, tras tan sólo unas 53.000 unidades vendidas a lo largo de tres años la comercialización de aquella idea se clausuró en 1983. Eso sí, de una manera u otra aquello quedó insertado en el imaginario colectivo de Honda volviendo a aparecer de manera tan inconsistente como recurrente.

De esta manera, hace unos diez años la casa nipona anunció su intención de resucitar el concepto para, durante el pasado 2020, registrar un diseño en la Oficina de Patentes de los Estados Unidos bajo el nombre de Motocompacto. Denominación comercial bajo la que ahora se nos presenta lo que, a todas luces, es una reedición de la Motocompo de los años ochenta bajo los nuevos cánones eléctricos.

Según lo que ha podido trascender hasta el momento su autonomía es de unos 19 kilómetros, pudiendo llegar hasta los 24 kilómetros por hora de velocidad punta a la par que, pesando tan sólo unos 18 kilos, es capaz de soportar hasta 120 de carga. Asimismo, la batería llega a la carga plena en tres horas y media, siendo así un vehículo con credenciales adecuadas para lo que se pueda esperar de un “última milla”.

honda motocompacto 2023

Plegada como una maleta parece mentira que en ella se encuentren todos los elementos necesarios para conducir de forma homologada; pero es así

Ahora. ¿Tiene sentido la Honda Motocompacto en un mundo donde el patinete eléctrico ya brinda un servicio muy similar? Bueno, lo cierto es que no lo parece. Sin embargo, y al igual que pasara con su antecesora de combustión, este modelo bien puede encontrar un escueto pero fiel nicho de mercado entre quien desee una opción personal y distintiva para su movilidad personal en el entorno urbano. En fin, Honda es una de las empresas más inteligentes en el ámbito del transporte y, por tanto, siempre sabe muy bien qué hace y porqué lo hace.

COMPARTE
Sobre mí

Miguel Sánchez

Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches, y ahora también las motos. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.

Ángel Arias

La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.

Alejandro Delgado