Como otros tantos fabricantes de motocicletas Kreidler, basado en Kornwestheim (Alemania), se dedicó primero a otras actividades industriales, concretamente metalurgia y electricidad. Uno de sus modelos de los años 50, Kreidler Amazone, está relacionado con un coche, el Volvo Amazon, del que rendimos cuenta en la web hermana.
Repasamos brevemente… Bien entrados los años 50 Volvo preparaba el lanzamiento de un nuevo modelo (P210), y se buscó un nombre con gancho. Salió “Amason” (en sueco) para rendir culto a la figura mitológica de la Grecia antigua. Por motivos de marketing se prefirió “Amazon” por ser más internacional, pero una denominación similar la había registrado antres Kreidler para uno de sus ciclomotores: “Amazone”, en alemán.
El fabricante germano había comenzado en el negocio de las motocicletas poco antes, en 1951. Fue cuando se puso a la venta la K 50, que no era ni más ni menos que una bicicleta con un motor de gasolina para asistir al pedaleo. Muchos fabricantes empezaron así, como la propia Suzuki con la Power Free, o Laurin & Klement (los padres de Skoda) con su Tipo 1.
En 1955, cuando salió al mercado la Kreidler Amazone (K52) el fabricante ya tenía en su catálogo varios modelos de ciclomotor. Recordemos que buena parte de Europa seguía recuperándose de las secuelas del gran conflicto bélico que la arrasó entre 1939 y 1945. La primera serie de la Amazone tenía un motor de 49 cc (38×44 mm) de dos tiempos que rendía 2 CV a 4.500 RPM. Solo era para un ocupante.
Tenía dos velocidades seleccionables con una palanca para cambiar a mano. Su peso era de solo 49 kg y desarrollaba una velocidad de 40 km/h. Este modelo apareció poco antes de la Florett, mucho más conocida, y mantenía el mismo motor de la Kreidler K 50 antes mencionada.
En cierto momento, concretamente en 1959, una de cada tres motos en Alemania era un Kreidler
Poco después, en 1957, aparece la Kreidler Amazone de segunda serie, que se vendió hasta 1959. El motor originario de la Florett (aunque capado) tenía distinta la dimensión interna (40×39,7 mm) y se mantuvo la potencia, pero un régimen más bajo, a 4.000 RPM. El cambio seguía siendo manual y podía ser de dos (K52-2) o tres velocidades (K52-3), con la misma velocidad punta en cualquier caso. Pesaba 11 kg más que la primera serie. Se pueden distinguir fácilmente por el manillar (más bajo en la segunda serie) y por la forma del tubo de escape en su primer tramo.
A nivel técnico tenemos un chasis de acero prensado, horquilla rígida y basculante trasero amortiguado. Las ruedas podían ser 23×2 o 23×2,5, siempre frenadas con tambores de 100 mm de diámetro. El faro del mismo diámetro venía de serie y contaba en su parte superior con un velocímetro tarado hasta los 60 km/h. En el depósito de gasolina entraban 5,7 litros, de los cuales 0,85 litros eran reserva, y se pintó cromado en las K52-3.
A pesar de lo poco que duró la Amazone en el mercado, Volvo se conformó con usar la denominación comercial “Amazon” únicamente en los países nórdicos tras pactar con Kreidler, y en el resto de los mercados se distinguió por las cifras 121 (berlina), 221 (familiar) y 123GT (coupé “deportivo”).
La gama Florett se mantuvo en producción hasta 1969 y merece que su historia se cuente aparte
Los precios de la Kreidler Amazone en la República Federal de Alemania (RFA, la “Alemania buena”) fueron de 635 marcos para la primera serie, 698 marcos para la segunda serie con dos velocidades y 738 marcos para la de tres. Había que pagar aparte por la bandeja portaequipajes, espejo retrovisor, llantas con perfiles blancos o el escudo para las piernas. Los colores fueron combinaciones de azul claro con marfil.
Sabemos también que entre 1964 y 1965 hubo un prototipo de triciclo de carga (Lastendreirad) basado en la Kreidler Amazone, que tenía la caja en la parte delantera y un eje con dos ruedas 21×2,75, y del manillar hacia atrás era como el ciclomotor normal. Las características técnicas son fundamentalmente las mismas, aunque podía cargar con más peso y el depósito era un poco más grande -9,2 l- para hacer frente a un aumento del consumo de gasolina. Medía 2.500 mm de largo, 1.000 mm de ancho y 1.050 mm de alto. Seguramente se desechó por tener un manejo un poco complicado.
La actividad de Kreidler en las motos acaba en 1982, traspasando los derechos de marca a Rudolf Scheidt, propitario de la italiana Garelli Motorcycles, que produjo ciclomotores con esa marca hasta 1988. Entre el legado que dejó Kreidler hay que citar ocho campeonatos del mundo de 50 centímetros cúbicos, el de 1975 se lo consiguió un tal Ángel Nieto.
Javier Costas
Me gustan los coches desde que tengo uso de razón (o antes), las motos siempre me han inspirado mucho respeto, y sin saber cómo, ya me han enganchado.COMENTARIOS