Brixton no es una firma que a estas alturas necesite presentación a pesar de llevar solo 6 años en España, además, puedes encontrar en nuestras páginas virtuales la prueba de la Brixton Crossfire 500 X y la Brixton Crossfire 125 SX, dos modelos que han dejado un buen sabor de boca que ahora, se verán acompañadas por una nueva hermanita, destinada al carnet A1 o el B con más de tres años de antigüedad, completando la gama del modelo más popular de la firma austriaca.

Evidentemente, hablamos de la Brixton Crossfire 125, que mantiene los mismos rasgos vintage que la Crossfire 500, pero combinado con un motor de 125 centímetros cúbicos que se queda ligeramente por debajo de la potencia máxima para esta cilindrada, aunque destaca por ser un propulsor de nuevo diseño. La moto se presentó en el EICMA de 2019, pero ya sabemos todo lo que vino después y, por tanto, los retrasos son más que justificados.

Dicho propulsor es un cuatro tiempos, como cabría esperar, pero por primera vez refrigerado por líquido. Rinde 13,5 CV y un par de 10,5 Nm, que llegan al asfalto mediante un cambio manual de seis relaciones que, al igual que el motor, es un nuevo desarrollo. Está montado en un chasis de tipo doble cuna de acero, con basculante del mismo material controlado por un monoamortiguador y completado por una horquilla delante invertida. Se apoya sobre el suelo gracias a unas ruedas de 120/70 delante en llantas de 18 pulgadas y 140/70 en llantas de 17 pulgadas detrás. Los frenos, por su parte, cuentan con un disco delantero de 300 milímetros de diámetro delante con pinza de anclaje radical y un disco trasero de 280 milímetros y pinza de doble pistón de anclaje convencional.

La gama Crossfire se distingue por un diseño que mezcla con acierto el estilo vintage y los toques modernos, algo que parece estar funcionando la mar de bien en el sector de las convalidadas. Es cierto que según el ángulo desde el que se la mire, recuerda ligeramente a la Husqvarna Svartpilen, pero eso no le hace perder el atractivo. El faro delantero, por ejemplo, es LED, que se combina con el ya conocido depósito X-Tank (con 11 litros de capacidad) y un portamatriculas trasero de tipo flotante. La instrumentación es digital, con indicador de marcha engranada.

Estará disponible en dos colores: marrón mate y gris, y los precios arrancan en 3.899 euros en España.