Moto del día: Bultaco Saturno

Moto del día: Bultaco Saturno

Fue una de las representantes más accesibles en la gama de la marca durante los años sesenta


Tiempo de lectura: 4 min.

Con una producción de unas 3.000 unidades desde otoño de 1964 hasta mediados de 1966, la Bultaco Saturno es una de las monturas de la marca menos conocidas si nos centramos en la década de los sesenta. Y esto, ¿a qué se debe? Obviamente no a una cuestión de cantidad. Al fin y al cabo, las motocicletas de competición no se caracterizaban por tiradas especialmente amplias y, sin embargo, se han escrito ríos de tinta sobre ellas. Ahí están las TSS para demostrarlo. Entonces, ¿tiene que ver con la mediocridad del día a día? ¡Para nada! Lejos de ello, cualquier aficionado tiene en mente a no pocos modelos turismo fabricados en tandas de miles. Precisamente por lo efectivo de sus diseños donde deportividad y practicidad se dan la mano.

Entonces, ¿qué es lo que pasa con la Bultaco Saturno? Pues bien, entrando en un terreno de opiniones personales diríamos que todo se debe a la indefinición. Y es que, tal y como dicen los responsables del Club Bultaco Australia – con un ejemplar archivo virtual donde la historia de la marca aparece perfectamente ordenada – estamos tratando con un diseño a medio camino entre la utilidad de la Mercurio y la deportividad de la Metralla. Pero, eso sí, priorizando siempre el silencio y la fiabilidad del motor por encima del rendimiento. Es decir, en gran medida a la Bultaco Saturno se la puede definir como una montura sin personalidad propia.

Algo que, cuando la motocicleta pasó a ser un objeto secundario ante el auge de los utilitarios accesibles como el SEAT 600, no estaba bien visto por un mercado donde lo especial y diferenciador se imponía por encima de la necesaria universalidad dada hasta finales de los cincuenta. Así las cosas, esta evolución de la turismo 200 de 1962 no logró un éxito especial envuelta en una gama donde destacaban la Metralla 62, la Sherpa T “ Sammy Miller ” o la TSS con un nuevo sistema de refrigeración líquida por termosifón tal y como ya hiciera la británica Scott con su Flying Squirrel de los años veinte.

A pesar de estar orientada hacia la deportividad y la competición, Bultaco lanzó desde el primer momento modelos para ser vendidos de forma masiva y así poder cuadrar las cuentas

Bultaco Saturno, una motocicleta correcta

En la historia del motociclismo ibérico no pocas marcas derivaron hacia la competición alternando monturas deportivas con su oferta básica de motocicletas turismo. Sin embargo, el caso de Bultaco es distinto. No en vano, cuando Francisco Bultó la fundó en 1958 junto a otros integrantes salidos de Montesa lo hizo con la deportividad por bandera. Esa deportividad limitada por los deseos más racionales de su socio en Montesa Pere Permanyer. Debido a esto, aunque en la marca encontramos diseños efectivos para su uso en el día a día, lo cierto es que ésta viene dominada por la bandera a cuadros.

Llegados a este punto, un simple vistazo a la gama de Bultaco a mediados de los sesenta nos revela la combinación de motos con vocación de circuito con otras pensadas para correr por trazados campestres. Sin embargo, entre medias resulta imposible no fijarse en diseños como el de la 200. Nacida en 1962, esta turismo evolucionada a partir de la 155 montó un nuevo motor monocilíndrico con casi 17 CV capaz de dar a esta montura un carácter viajero. Algo así como, lo que según más de un buen bultaquista, podría definirse como el inicio de una saga Gran Turismo.

A partir de la 200 – de hecho usaba el mismo bloque motor – se presentó en 1964 la Bultaco Saturno. Eso sí, esta vez la mecánica se reguló para entregar una respuesta más tranquila incluso. Algo que la acercaba a la práctica y popular Mercurio, priorizando la fiabilidad y el manejo sencillo por encima de cualquier consideración lúdica o prestacional. Además, se reforzó el bastidor de cuna simple y se añadió un cambio de cuatro velocidades.

bultaco saturno (1)

Capaz de ofrecer fiabilidad y comodidad en largos viajes, algunos consideran a esta motocicleta como un precedente de las gran turismo

Con todo ello, los 15 CV de la Bultaco Saturno movían con decencia los alrededor de 100 kilos entregados en báscula. Y es que ésa era la palabra: decencia. Decencia y durabilidad para definir una motocicleta sustituida por un modelo definido en los mismos parámetros: el Senior de 1966. Otro modelo muy interesante para cualquier coleccionista aunque tampoco llegase a ser parte de las creaciones más representativas de la marca, condicionado por un precio demasiado alto para ser un producto popular y un comportamiento demasiado sobrio para destacar en el nicho prestacional o deportivo.

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Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.

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