KTM Duke 390 2025: Una naked sencilla, pero matona

KTM Duke 390 2025: Una naked sencilla, pero matona

La firma austriaca sigue mejorando su segmento de media cilindrada con una de las motos más vendidas


Tiempo de lectura: 5 min.

En el exigente segmento de las naked deportivas de media cilindrada, la KTM Duke 390 se ha consolidado como una de las referencias más atractivas para quienes buscan una moto ligera, potente y moderna. La versión 2025 llega con una serie de mejoras que refuerzan su espíritu, adaptándose a las peticiones de un público joven, dinámico y que tiene un gran gusto por la tecnología sin perder la deportividad.

KTM ha sabido mantener el equilibrio perfecto, convirtiendo esta moto en una de las opciones ideales para quienes se inician en la categoría como para pilotos con experiencia. El rediseño no es un cambio estético, con nuevas líneas afiladas o un frontal en forma de X con tecnología LED, sino que también viene con ajustes en la electrónica, motor y parte ciclo.

Eso hace que sea ese fiel exponente de la filosofía austriaca, una moto que ha sido diseñada para divertir y ofrecer esas prestaciones deportivas que busca un amplio público, sin perder la esencia que todos buscábamos en ella. Lo hace con el equilibrio técnico perfecto que hace que se mantenga intacta en un mercado muy exigente.

Motor y prestaciones: potencia controlada y moderna

El motor monociclíndrico de 373 cc con sistema de inyección electrónica Bosch representa el núcleo mecánico más avanzado de la Duke 390. Con la intención de cumplir con la Euro 5+, se ha optimizado la combustión para mejorar la eficiencia térmica y la reducción de emisiones contaminantes, todo ello sin sacrificar el rendimiento. Esto se traduce con una potencia de 44 CV a 9.500 rpm, mientras que el par motor roza los 37 Nm a 7.500 rpm, cifras que garantizan esa respuesta rápida y potente en cualquier momento.

KTM Duke 390 2025

Este propulsor se distingue por su entrega de potencia progresiva y lineal, lo que se ve también en la curva del par, que tiene la capacidad de tener recuperaciones ágiles desde bajas revoluciones, lo que hace que sea una moto perfecta para la ciudad, mientras que a altas revoluciones tiene ese empuje enérgico y deportivo que no defrauda en carreteras reviradas o circuitos técnicos.

A esto hay que sumarle el sistema Ride-by-Wire que incorpora, que moderniza la gestión del acelerador, eliminando el clásico cable y ofreciendo esa respuesta electrónica precisa que todos queremos tener. Esto, en otras palabras, significa que tienes una conducción suave y controlada, mientras que la electrónica mejora la seguridad sin ser especialmente intrusiva.

El embrague antirrebote es fundamental en este modelo, lo que hace que tengamos cambios rápidos y seguros. La caja cambios de seis marchas tiene relaciones ajustadas para maximizar la aceleración sin penalizar la comodidad a velocidades de crucero, lo que hace que esta moto sea divertida en cualquier situación.

Parte ciclo y suspensiones: agilidad y precisión dinámica

El bastidor tubular de acero de tipo trellis, es una de sus señas de identidad y para la nueva generación se ha refinado para lograr la combinación perfecta entre rigidez y ligereza. El motor, que es un elemento estructural más, contribuye una distribución de masas perfecta, lo que hace que se mejore el equilibrio y la manejabilidad.

KTM 390 Duke 2025

En cuanto a su parte ciclo, viene con suspensiones WP Apex, que se han ajustado. La horquilla delantera invertida de 43 mm es regulable en precarga y compresión, lo que permite adaptar la respuesta a diferentes pesos de piloto o estilos de conducción. Su acción es firme, pero eficaz en absorción de baches, proporcionando la estabilidad que queremos en frenadas, siendo especialmente suave. En cuanto al monoamortiguador trasero, sigue la misma línea.

El equipo de frenado es de lo más potente que hay en su segmento. Con un disco delantero de 320 mm y una pinza radial Brembo de cuatro pistones, proporciona esa potencia y modulación que necesita una moto de esta cilindrada. El disco trasero de 230 mm complementa el conjunto, mientras que el sistema ABS de doble canal garantiza esa seguridad activa que todos necesitamos.

La KTM Duke 390 es una de las motos más modernas. Con un cuadro de instrumentación TFT de 5 pulgadas a color, sorprende su calidad y resolución. Con ello se permite visualizar de manera intuitiva lo que sucede en la moto y tenerlo todo controlado. Al mismo tiempo, se puede controlar mediante la aplicación KTM My Ride.

Ergonomía y confort: Deportiva pero accesible

Combinar la deportividad y la comodidad es posible. Este modelo tiene una posición de conducción un tanto más adelantada, con un manillar más ancho y bajo, lo que favorece una postura activa y dinámica. En cuanto al asiento, que tiene una altura de 830 mm, hace que puedas estar cómodo. El diseño del depósito, con superficies angulosas y un buen agarre para las rodillas, hace que no se pierda el control.

KTM 390 Duke 2026

Bien es cierto que la protección aerodinámica es limitada, pero es más que suficiente para ciudad y vías secundarias, pero insuficiente en autovías. Eso sí, su ligereza y agilidad compensan esa situación, haciendo que sea una moto divertida para los que valoran la maniobrabilidad por encima de la protección.

No es la moto con más potencia ni electrónica más avanzada que hay ahora mismo en el mercado, pero sí es la que ofrece una experiencia directa, completa, emocionante y sobre todo, rápida, perfecta para un público joven, atrevido y urbano, que quiere adentrarse al mundo de la moto.

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Alejandro Delgado

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Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.

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