La BMW R1300 R Titan es, posiblemente, una de las motos más locas que ha creado la firma alemana en los últimos tiempos. No solo es radical en cuanto a diseño, también su planteamiento es muy agresivo y aplica soluciones como la inyección de óxido nitroso, muy poco vistas en el mundillo de las dos ruedas fuera de los circuitos de aceleración yankees.
Es interesante analizar la evolución de BMW Motorrad durante las últimas décadas. Hemos pasado de una marca muy particular y con diseños muy polarizantes allá por los 90, a una marca un poco más abierta en cuando a diseños, con motos de personalidad más popular y con un talante deportivo que iba in crescendo cuando comenzó el Siglo XXI, para terminar con una personalidad de marcado talante deportivo incluso en las motos más viajeras, tanto en diseño como en prestaciones y soluciones aplicadas. Una metamorfosis que tiene en la BMW R1300 R Titan una de sus representaciones más radicales.
No estamos ante una moto de producción en serie, aunque más de uno seguro que está dispuesto a pagar un buen pellizco por tener algo así en el garaje, se trata de una motocicleta única, desarrollada por un pequeño equipo con el único objetivo de crear algo muy especial y único, sobre la base de la nueva BMW R1300 R. Y no cabe duda de que lo han logrado, pues pocas BMW pueden presumir de un aspecto tan amenazante, ni siquieras las versiones HP se acercan y eso que esas siglas representaron lo más deportivo y veloz de la marca.

La BMW R1300 R Titan es, sin duda alguna, muy potente visualmente, con una fisonomía realmente compacta y muy centrada en la zona delantera de la moto. Ahí, el motor, el depósito y la horquilla forma el núcleo de todo el diseño, que se ve potenciado por unos añadidos aerodinámicos laterales que acentúan la anchura del depósito. El manillar, muy bajo, se combina con unos reposapiés muy retrasados y dan lugar a una posición de conducción absolutamente radical y nunca vista en una BMW.
El chasis, el basculante, la suspensión delantera… Todo está adaptado o se ha creado en específico para esta creación, que tiene en la aceleración su razón de ser. De ahí, por ejemplo, que el basculante sea más largo y que se haya optado por la inyección de NOx en el motor con lo que garantizar un extra de potencia en plena aceleración. Se puede apreciar la botella que contiene el óxido nitroso entre los silenciadores que, por cierto, han sido desarrollados por Akrapovic.
Una moto muy radical, muy, muy extrema para ser una BMW. Atractiva, deseable y seguramente, tan cara como un piso en el centro de Madrid. No obstante, nunca llegará a producción, así que esto último no tiene la mayor importancia.
Javi Martín
Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.COMENTARIOS