La Kawasaki ER-6F es una motocicleta polivalente de media cilindrada. Es de esos modelos que lo mismo sirven para un roto que para un descosido y que sin destacar especialmente en ninguna faceta consiguen el aprobado en un buen número de situaciones.
La Kawasaki ER-6F llegó al mercado en 2006 junto con su hermana naked, la Kawasaki ER-6N. Tuvo un par de actualizaciones, la primera en 2009 y la segunda en 2012. En estas revisiones del modelo se cambiaron tanto aspestos estéticos como técnicos. El modelo de 2006 contaba con unas lineas redondeadas, instrumentación analógica y un monofaro delanterero. Además, su chasis destaca por estar pintado en colores llamativos (granate, color caqui, etc…).
A partir de 2009 se le dió al modelo un aire mucho más actual y agresivo con un bifaro delantero, instrumemntación digital y unas fibras de imagen mucho más fuerte. El carenado ganaba en tamaño y en presencia al incluir aristas afiladas por toda la carrocería. También se revisó el motor, que incorporaba un nuevo sistema de inyección más sofisticado así como otros cambios menores.
Por ultimo, el modelo de 2012 introdujo menos cambios estéticos. Se actualizaron ligeramente las lineas y se incluyó una instrumentación mixta: reloj analógico para las rpm y pantalla digital para el resto de información. El motor también se revisó buscando mejor respuesta en bajos y medios. Por último también se mejoro someramente la geometría de la moto para buscar una posición de conducción más cómoda
En 2014 la Kawasaki ER-6F dejó de venderse y fue sustituida por la Kawasaki Ninja 650R que mantuvo el mismo propulsor pero cambió de concepto, buscando una orientación más agresiva y sport a consta de perder practicidad y comodidad.
El motor es un bicilíndrico en linea de 650 cm3 con ocho válvulas y refrigeración líquida. Desde las primeras versiones ya incorporaba inyección electrónica. La potencia que entrega es de 74 CV a 8.500 vueltas y como suele ser habitual en los “bi”, está muy lleno en todo el rango de revoluciones y ofrece una curva de par muy plana. Hablando de par, el máximo es 66 Nm a 7.000 rpm. El consumo no es elevado y pueden conseguirse medias ligeramente por encima de 4,5 l/100 Km. La caja es de seis velocidades y de velocidad punta alcanza los 220 Km/h.
La parte ciclo está compuesta por un chasis de diamante construido con tubos de acero. Para la suspensión delantera se recurre a una horquilla telescópica de 41 mm y un monoamortiguador con ajuste en precarga colocado lateralmente para el eje trasero. El freno delantero está encomendado a una pareja de discos de 300 mm mordidos por pinzas de anclaje axial de dos pistones.
A sus mandos, la Kawasaki ER-6F es una moto un poco alta pero bastante corta y recogida en general. Tiene una cintura estrecha que permite llegar sin problemas al suelo incluso si eres una persona de baja estatura. La postura de conducción es erguida gracias a su manillar que cuenta con una elevación muy generosa.
A parte de esto la presencia del carenado y la cúpula ayuda mucho con el viento y las inclemencias del tiempo en carretera abierta. Gracias a estas características, es una moto que te permite realizar viajes sin mucho problema. Por otra parte, las suspensiones son tirando a duras, y el tacto directo del motor hacen de ella una moto divertida en la típica carretera de curvas.
Quizá la ciudad sea su faceta menos brillante. Su peso, 178 Kg en vacío, se nos antoja demasiado elevado para este tipo de moto. Por otra parte el radio de giro no es especialmente bueno. Aun así, en ciudad sigue siendo una buena moto, solo que lo es todavía más fuera de este ámbito.
Estéticamente sus lineas son neutras y tranquílas, a diferencia de a lo que nos suele tener acostumbrados la casa de Akashi con su gama de super deportivas. Toda la moto se vertebra entorno a un único eje que discurre desde la pipa de dirección hasta el final del basculante. Para lograr esto, el chasis y el basculante están alineados junto con el amortiguador lateral trasero, dotando al conjunto de mucha continuidad.
A parte de esto, todo el “peso” estético del modelo recae en la parte frontal con el carenado inflando la presencia del modelo, mientras que para la zaga se recurre a un colín estrecho, muy minimalista. El silencioso se ubica discretamente en la zona inferior de la moto y no reclama apenas protagonismo.
Los precios en el mercado de segunda mano comienzan en unos 2.200 euros para las unidades de la primera serie. En mi opinión, la mejor opción son las motos entre 2008 y 2012 ya que su estética se sigue manteniendo fresca y actual, y además subsanaron algunos males de juventud de los primeros años. Su precio: a partir de 3.000 euros. Si quieres una de las últimas, entonces habrás de subir a 4.000 euros.
Para concluir, considero que la ER-6F es una buena opción si sólo puedes tener una moto, y necesitas que cumpla en todos los frentes. Es complicado combinar una faceta sport bastante conseguida con comodidad y uso polivalente para el día a día. Si además os digo que tiene un consumo y mantenimiento reducidos… pocos peros pueden sacársele a este modelo.
Gonzalo Lara Camarón
Ingeniero de software a tiempo completo y apasionado del motor en mis ratos libres. Los coches me gustan desde que tengo memoria, pero fue descubrir las motos y la “enfermedad” fue a peor. Mi sueño es recorrer todos los rincones del mundo sobre dos ruedas.Tengo una ER6-F ’12 y tengo que decir que lo que se recoge en el artículo es la realidad de esta moto que para muchos pasa desapercibida, pero que incluso ahora, 10 años después sigue siendo una muy buena opción dentro de la media cilindrada como moto de acceso o como opción del A2. Sobre todo para aquellos que no nos termina de convencer la estética trail y preferimos las sport-turismo de las que ya cada vez van quedando menos….esperemos que no dejen de faltar motos de este segmento. Es muy dócil y divertida de conducir en tramos de curvas,… Leer más »