OSSA fue una de las marcas con más carisma de cuantas tuvimos en España, aunque su denominación, OSSA, parece extranjera –al igual que Puch parecía española y no lo era–. Su logotipo, un trébol de cuatro hojas, marcaba los depósitos de sus motos, aunque en realidad, no era un trébol, sino el mecanismo de escape de un proyector de películas, pues la compañía empezó sus días como especialista en equipos cinematográficos, algo que ya hemos comentado en alguna ocasión.

Las motos de OSSA casi se reconocían con un sencillo golpe de vista y contó con modelos como la OSSA Yankee 500, de lo más espectacular y avanzado que había en España firmado por una compañía local, al tiempo que eran capaces de crear máquinas como la OSSA 250 Monocasco que pilotó Champi Herreros –fabricada con materiales importados ilegalmente, por cierto–. Sin embargo, al contrario que otras paisanas como Bultaco o Montesa, OSSA no apostó tan fuerte por el todoterreno ni tampoco insistió como las demás en Estados Unidos, donde las motos españolas se convirtieron en referencia para muchos.

OSSA iba un poco por libre. La podríamos comparar, salvando las distancias, obviamente, con Kawasaki, aunque con un talante menos deportivo que la compañía nipona. La española contaba con buenos productos y cuando las modas eran rentables, se subía al carro, pero siempre a su estilo, como eran sus motos todoterreno, que por lo general, siempre derivaban de sus modelos de carretera hasta que llegó la OSSA Stiletto.

Con la OSSA Stiletto, la marca española dejó de convertir sus motos de carretera en motos off road, y desarrolló un modelo específico para todoterreno que estuvo en producción entre 1967 y 1973 con motores de diferentes cubicajes. Merece la pena mencionar, que la OSSA Stiletto comenzó como OSSA Scrambler y formaba parte de una familia off roader que estaba compuesta por un modelo de trial –la OSSA Pluma– y una enduro –OSSA Enduro/Pioneer–.

Las primeras OSSA Stiletto se ofrecían con motores “dos tiempos” de 230 centímetros cúbicos, hasta que en 1969, se crearon dos versiones, una con 175 centímetros cúbicos y otra con 250 centímetros cúbicos, las cuales, desde 1976, recibieron una caja de cambios de cinco relaciones. En general, las motos se diferenciaban por sus motores, ya que el chasis y la carrocería eran compartidos. El primero era un doble cuna con horquilla telescópica y dos amortiguadores para la rueda trasera, mientras que los frenos eran de tambor en todos los casos y la carrocería, como en el resto de modelos rivales, se fabricaba con fibra de vidrio.

Con el tiempo pasaron a denominarse OSSA MX125 y OSSA MX250 cuando montaron la caja de cinco relaciones, más una adicional adaptada a los desiertos de Estados Unidos conocida como OSSA 250TT. Se fabricaron hasta 1973, cuando apareció la OSSA Phantom para sustituirlas.

La imagen de portada muestra una unidad de la OSSA Stiletto que Vintage Motor Factory tenía a la venta