No es lo mismo FZR400 que FZ 400R. La Yamaha FZ 400R se presentó en mayo de 1984 y fue el resultado de un desarrollo que se llevó a cabo en paralelo con el de la máquina del equipo oficial de competición, la Yamaha FZR400. Era un modelo muy esperado por los fanáticos de Yamaha y era la “réplica” de carreras que la firma japonesa necesitaba.
Yamaha había sido aclamada durante mucho tiempo por sus motores “dos tiempos” de entre 250 y 350 centímetros cúbicos. Habían sido la referencia entre los de su clase por prestaciones, pero en lo que se refiere a deportivas equivalentes con motores de cuatro tiempos, Yamaha iba por detrás de los demás.
El segmento de las 400 se le atravesaba ligeramente, sobre todo las llamadas “réplicas de carreras”, las deportivas basadas en las máquinas usadas en competición. Por entonces, allá por la década de los 80, la firma japonesa tenía, en su mercado local, la XJ400, que era un modelo con cierto talante deportivo pero, sobre todo, un buen equilibrio general para un uso diario continuo.
No obstante, el auge de las “réplicas 400” provocó que Yamaha diera el paso definitivo y desarrollara una moto para el segmento de las deportivas más radicales de 400 centímetros cúbicos y cuatro tiempos. Para ello, se partió del motor de la XJ400, un cuatro cilindros de 399 centímetros cúbicos refrigerado por líquido y de carrera ultracorta –54 por 43,6 milímetros, para diámetro y carrera–, que se revisó por completo para mejorar su rendimiento deportivo.
Según datos oficiales de la marca, este motor rendía 59 CV a 12.000 revoluciones y 3,7 mkg a 10.000 revoluciones. Era el propulsor más potente de su clase y tenía que mover un conjunto de 166 kilos, cuya estructura principal no parece ser, a simple vista, algo especialmente resistente. El chasis era una estructura de tubos de sección cuadrada, de diseño tradicional.
Las pruebas de la época lo decían claro al decir cosas como “la ficha técnica no deja apreciar el interés real de motor y chasis”. En cuanto a agilidad, la Yamaha FZ 400R era la referencia de su categoría, pero en carretera abierta, la dureza de la suspensión la hacían la más incómoda de todas, lo que sumado a un ángulo de giro muy, muy límitado, hacían de la Yamaha FZ 400R una moto muy poco indicada para usarse por el centro de la urbe.
Con la FZR 400, que se desarrolló simultáneamente, Yamaha ganó el All Japan Championship de 1984 en la categoría Formula 3.
Javi Martín
Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.COMENTARIOS