Harley-Davidson ha decidido lanzar un nuevo modelo englobado dentro de la familia Solftail. Se trata del modelo más económico de todos convirtiéndolo así en la motocicleta de acceso al universo Big Twin. Y es también una motocicleta que gracias a que prescinde de casi cualquier aditamento, se convierte en la opción ideal para aquellos que les gusta personalizar sus monturas. Hablamos de la nueva Harley-Davidson Softail Standard 2020.

La marca americana ya tuvo un modelo con este mismo nombre, pero de aquello han pasado más de diez años. Se trataba de la FXST (denominación oficial) y estuvo a la venta hasta 2007. Usando el chasis Softail de entonces combinaba el motor Twin Cam 96B de 1.584 cc junto a una enorme llanta delantera de 21″ y otras trasera de 17″. Y como la actual, era el modelo más económico del catálogo y también la moto preferida para modificar a gusto de cada uno.

Trece años de evolución dan para mucho y eso se nota. Además que sea una moto económica no está reñido con el hecho de que Harley haya incluido en la Harley-Davidson Softail Standard 2020 algunas mejoras respecto a otros modelos de la familia. Por ejemplo en el chasis ya que cuenta con un anclaje rígido al motor que aumenta la rigidez del conjunto (también ayuda el nuevo basculante). Se busca así un comportamiento más preciso en cualquier situación.

Como buena Softail la parte trasera sigue simulando tratarse de una motocicleta hardtail, es decir, sin suspensión posterior. Esto se consigue ubicando el amortiguador bajo el asiento de forma que quede oculto. Es regulable y para ponerlo a nuestro gusto solamente es necesario quitar el asiento para tener un acceso libre. Otra novedad es la horquilla delantera de doble válvula o los frenos revisados de cuatro pistones.

En la nueva versión de la Softail Standard se ha prescindido de la llanta delantera de 21″ del modelo antiguo y, en su lugar, se monta una de 19″ que mejora el comportamiento. La reducción del diámetro también se ha llevado a la parte trasera con el fin de mantener una silueta bobber y por ello la llanta posterior es de 16″. La anchura del neumático delantero es de 100/90 mientras que en el trasero no se ha buscado un tamaño excesivo, permaneciendo en un relativamente estrecho (para los estándares actuales) 150/80.

Mientras las llantas presentan un acabado cromado, las botellas de las horquillas están lacadas y tanto las pletinas de la dirección como las torretas y el manillar Mini-Ape están pulidos. El asiento trasero a 680 mm del suelo y estilo Tuck-and-Roll es responsable de la posición que se adopta a los mandos. Puños al viento lo llama HD.

Solamente hay una opción de pintura a elegir, el Vivid Black. Combina tonos negros y brillantes que resalta el minimalismo. El depósito de combustible es de 13,2 litros y sobre él, un logotipo clásico y limpio. La instrumentación reduce su tamaño al mínimo para no quitar presencia al frontal. Está formada por una LCD con área visible de 2,14″ con velocímetro, marcha engranada, odómetro, nivel de combustible, reloj horario, cuentakilómetros parcial, autonomía y tacómetro. Por cierto, los cromados están presentes pero solamente en el escape dos en dos tipo Shotgun, el bisel del faro y los intermitentes.

Por último la Harley-Davidson Softail Standard 2020 disfruta del motor Milwaukee-Eight 107 V-Twin con doble eje de equilibrado. Culata de cuatro válvulas y una potencia máxima de 86 CV (a 5.020 RPM) además de un contundente par máximo de 145 Nm a solamente 3.000 vueltas. El negro predomina en el propulsor aunque las tapas de los balancines, la del encendido y la de la transmisión primaria están pulidas. Como detalle se monta un filtro de aire redondo con tornillo central. El peso total en orden de marcha se queda exactamente a las puertas de los 300 kg ya que pesa 297 kg.

El precio de la Harley-Davidson Softail Standard 2020 se sitúa en los 14.500 euros. Junto con la HD Street Bob (15.850 euros) y la HD Fat Bob (19.300 euros) son los únicos tres modelos de la actual familia Softail que están por debajo de los 20.000 euros. Y como os podéis imaginar, las posibilidades de gastar el dinero de varias generaciones con accesorios para la Softail Standard puede ser un verdadero peligro.