Reconocida como Moto del Año en 1986, la Gilera KZ 125 venía a sustituir a la ya algo desfasada RV 125 con un producto donde se aprecia de forma notable el salto cualitativo. La KZ destacaba por su imponente estética con su semicarenado, obra del diseñador Luciano Marebese. Además, contaba con detalles técnicos destacados para la época y para una moto de baja cilindrada.
Otro detalle a tener en cuenta en esta moto de 125 cm3 era su avanzado motor, de dos tiempos y refrigeración líquida. Contando con la válvula de escape APTS que permitía variar la distribución de la potencia en función de las revoluciones del motor, y un cárter y un carburador Dell’Orto 28, el propulsor era capaz de entregar casi 30 CV a 9.900 RPM y 18 Nm a 10.250 RPM. Sin duda, una mejoría respecto a los 19 CV que producía su predecesora.
A través de una transmisión manual de seis velocidades, era capaz de alcanzar una velocidad máxima de 152,6 km/h, algo inalcanzable hoy en día con una moto de octavo de litro, donde la potencia queda limitada por ley a 15 CV. A nivel estructural, contaba con un chasis de vigas cuadradas de acero y una horquilla de 36 mm con sistema antihundimiento. Sobre esta, descansa una pareja de discos de freno de 240 mm y dos pistones que, junto con el trasero único de misma medida, garantizaba un frenado de 100 km/h a 0 en 43,3 metros.
El peso de la moto era relativamente contenido, de 126 kilos, 11 kilos menos que el modelo que venía a sustituir. En parte se debía al uso de un subchasis y llantas de 16 pulgadas Grimeca de aluminio, las cuales estaban montadas sobre neumáticos Pirelli de 100 mm de sección en el eje anterior y de 120 mm en el posterior. Era una moto de reducida cilindrada capaz de codearse de tú a tú con motos de superior cilindrada; y no solo en los ochenta, sino en el presente.
Con ganas de promocionar el modelo, Gilera organiza en 1987 el Campeonato Sport Production KZ que sería renovado un año después por la Copa MX1, la sustituta de la KZ 125, más rápida, con mejores componentes y más cara. Con la llegada de nuevos y duros rivales ese mismo año (Aprilia AF-1 y Cagiva Freccia), Gilera mejoró la estética con la KZ 125 Endurance. La calandra se actualiza a la moda bifaro, pero las prestaciones se mantienen.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS