El año que viene estará a la venta la primera moto eléctrica del fabricante americano, la Harley-Davidson LiveWire. En el Salón de Milán la moto ha hecho aparición en su forma definitiva, con una apariencia musculosa que declara sin ambages sus intenciones. Así es la Harley-Davidson del Siglo XXI, potencia americana a base de electrones. La LiveWire será la primera de una saga completa de motos eléctricas para 2022.
Contamos con nuevos detalles sobre su parte ciclo. Cuenta con un chasis de aluminio con el motor integrado, el cual transmite la fuerza a la rueda posterior mediante una correa. En esa ubicación rebaja el centro de gravedad, lo cual facilitará el manejo de la moto en cualquier circunstancia. No hay caja de cambios.
Tampoco tendrá el característico sonido de V2 de las Harley-Davidson, pero emitirá un sonido que incrementará en tono y volumen cuanto más rápido se circule, no sabemos si de forma natural o amplificada. El control de tracción (TCS) se encargará de evitar que la rueda trasera patine si se desboca mucho el par.
La parte ciclo es de primeras calidades, con horquilla delantera Showa SFF-BP, dos discos delanteros de 300 mm de diámetro con pinzas Brembo Monoblock y sistema ABS. Bajo el basculante trasero está el monoamortiguador trasero Showa BFRC-lite regulable y diseñado para entorno urbano. Las gomas Michelin Scorcher de 180 y 120 mm, respectivamente, se han diseñado específicamente para este modelo.
Las prestaciones de la moto y su comportamiento serán ajustables mediante los siete de modos de conducción disponibles, de los cuales tres son definidos por el conductor. Otro complemento tecnológico es la instrumentación TFT, con la información habitual y módulo de conectividad mediante Bluetooth para navegación, música, etc. Harley-Davidson dice que cualquier conductor podrá verla bien, su inclinación es ajustable.
Para cargar las baterías (RESS según Harley-Davidson) puede recurrir a un enchufe doméstico cualquiera (el cable se esconde bajo el asiento) o carga rápida mediante conector CCS Combo (en EEUU el SAE J1772). Harley-Davidson no ha especificado ni su capacidad ni cuánto tiempo tarda en cargar, obviamente la autonomía tampoco. La batería auxiliar, en vez de plomo, también será de iones de litio. En cualquier concesionario Harley-Davidson será posible recargar como servicio postventa.
Una carcasa de aluminio fundido abraza las baterías y les proporciona refrigeración pasiva. Los cárteres y tapas están pensados para transmitir visualmente su potencia, y la carrocería tiene un tratamiento para ofrecer el aspecto del metal anodizado. Los guardabarros van prácticamente soldados a las ruedas, quedando realmente discretos.
Habrá que esperar un poco más para conocer todos sus detalles. En enero de 2019 sabremos su precio y cómo se realizará el proceso de reserva para asegurar una de las primeras unidades.
Javier Costas
Me gustan los coches desde que tengo uso de razón (o antes), las motos siempre me han inspirado mucho respeto, y sin saber cómo, ya me han enganchado.COMENTARIOS