Cuando la American Motorcyclist Association cambió las reglas del campeonato de Superbikes en 1983 para limitar las motocicletas de cuatro cilindros a 750 cm3, Honda estaba lista. La compañía ya se había preparado para el cambio un año antes, alejándose de los motores SOHC enfriados por aire y dando la bienvenida a los V4 DOHC de refrigeración líquida con la Honda VF 750 F V45 Interceptor.
El resultado era una motocicleta de 748 cm3 que fue lanzada al mercado en ese mismo año. El motor se desplazó ligeramente hacia atrás para acortar la distancia entre ejes, y la caja de cambios de seis velocidades se redujo a cinco para dejar espacio a la cadena de transmisión. La línea roja del tacómetro del tetracilíndrico se situaba a 10.000 RPM, y la velocidad máxima era de 222 km/h gracias a los 86 CV que era capaz de desarrollar.
La horquilla delantera contaba con 39 mm de grosor, completamente ajustable, y un monoamortiguador trasero. Los frenos eran de disco, dobles en el eje delantero y simple en el posterior.
La realidad era que Honda necesitaba producir en serie la VF 750 F V45 Interceptor para poder competir en el campeonato de Superbikes
El chasis perimetral de acero no estaba seccionado para poder retirar el motor, aumentando la rigidez del conjunto. La Honda VF 750 F V45 Interceptor tenía un embrague deslizante de competición, que se desconectaba bajo frenadas intensas para evitar el bloqueo de la rueda trasera. El carenado parcial también fue razonablemente efectivo. El aire era enviado directamente al puesto de conducción, mientras una toma de admisión al frente forzaba la absorción de aire en el motor, como un RAM Air. Los colores a elegir eran rojo, blanco y azul oscuro, y las ubicaciones de los mismos variaron durante sus cuatro años de producción.
Entre los opcionales destacaban la posibilidad de montar un asiento monoplaza, portaequipajes y barras de sujección. Para 1984, La Honda VF 750 F V45 Interceptor acogió en su vano un motor de 700 cm3 para no sufrir el arancel de importación del 45 %. Aunque también hubo un modelo VF 1000 F de 998 cm3, con 115 CV para aquellos que deseaban aún más potencia. E incluso se introdujo una VF 500 F, más pequeña. La VF 1000 F desapareció en 1985 para ser reemplazada por la VF 1000 R, la descendiente de la fuerte CBR 1100 R.
Pesaba 249 kilos en seco. El depósito de combustible fue diseñado para ser angosto, lo que permitía al piloto esconderse tras el carenado. La idea sobre el papel era buena, pero la realidad a veces supera la ficción. Los árboles de levas fallaban tempranamente debido a un diseño del cojinete de leva defectuoso, concebido para dar el mejor rendimiento en el momento y reducir el coste de producción del motor. La fiabilidad del bloque fue tan deficiente que Honda casi abandona el proyecto por completo.
Honda solucionó el problema cambiando todos los árboles de levas con nuevos componentes, pero la reputación de su modelo con motor V4 ya estaba dañada. Sin embargo, fue un éxito de ventas y es considerada la primera moto réplica de Japón.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS