Hoy en día la firma sueca Husqvarna pertenece a KTM, y esto hace que haya bastantes similitudes entre los modelos de ambas marcas, pero esto no siempre fue así. Entre 2007 y 2013 la casa escandinava fue propiedad de BMW y durante estos pocos años dio tiempo para que la influencia germana se dejara notar en algunas huskies como la Husqvarna TR 650 Strada y también su hermana campera, la Husqvarna TR 650 Terra.

La Husqvarna TR 650 Strada era una trail monocilíndrica al estilo de la vieja escuela. Esta moto era algo así como la prima pija y premium de la BMW G 650 GS. En lineas generales ambas motos compartían bastantes soluciones, aunque los ingenieros de Husqvarna gozaron de cierta independencia para modificar, mejorar o sustituir algunos componentes aquí y allá con el fin de diferenciarse un poco de la gelände strasse.

El propulsor estaba basado en el vetusto pero eficaz Rotax monocilíndrico de 652 cm³ refrigerado por agua que se venía usando desde el año 2000 con la BMW F 650 GS. En este caso los ingenieros de Varese hicieron un poco de “magia” tocando aquí y allá, aumentando la relación de compresión y el régimen máximo de giro, consiguieron subir la potencia hasta los 58 caballos. Aun así, la moto se podía comprar limitada a 48 CV para los poseedores del carné A2.

En cuanto al chasis, tomaba como base el de las BMW, con su característico depósito de gasolina en la zona trasera de la moto, debajo del asiento, mientras que en el falso tanque escondía algunos órganos mecánicos como la batería o la caja de aire.

Donde la Huskie marcaba diferencias era en el tren delantero, gracias a una horquilla invertida de la que carecía su prima alemana y mejoraba notablemente el comportamiento dinámico. Esta horquilla delantera era un poco el baluarte de todo el trabajo de “personalización” que se hizo con esta moto.

La idea era conseguir una trail más dinámica, divertida y sport, buscando convencer a un público más joven que no se sentía atraído por la seria, racional y aburrida GS de “siempre”. De hecho, aunque sobre el papel estemos hablando de una trail, la Strada estaba 100 % enfocada en el asfalto y tenía un cierto carácter supermotard.

La prensa de la época la colocaba como una rival de la KTM Duke 690. La Husqvarna tenía un enfoque menos radical, pero en la práctica su precio era bastante más bajo y a la hora de la verdad… las dos servían más o menos para hacer lo mismo: desplazarte por ciudad siendo el más malote del barrio y arrasar en carreteras muy reviradas y de curvas lentas.

La Husqvarna TR 650 Strada supuso un efímero soplo de aire fresco para el mercado de las trails ligeras y monocilíndricas por debajo de los 200 kilos, un nicho que cuando se presentó este modelo ya estaba dando sus últimos coletazos. Se vendió solamente entre 2013 y 2014, por lo que muy pocas unidades llegaron al mercado ya que, además de esto, Husqvarna nunca ha sido un fabricante de gran volumen.

En resumidas cuentas, una curiosidad, un modelo desconocido y una peculiaridad de la historia motociclística fruto del intercambio de cromos del que fue víctima la firma durante aquellos años y que hemos querido recordar hoy con esta entrada.