Como si nos hubiésemos subido a una máquina del tiempo y saltado atrás dos años. Así ha sido la carrera de MotoGP del Gran Premio de Austria 2019. Tras una carrera en la que Marc Márquez y Andrea Dovizioso rodaron en solitario, el italiano ha sacado la magia en la última curva para llevarse la victoria.

Quizás no era el guión predefinido. Márquez había demostrado durante el fin de semana un gran ritmo, pero no así Dovizioso. Pero ambos pilotos sabían en que situación se encontraban. El de Cervera ya declaraba que el piloto de Ducati estaría ahí viendo si podía romper la cuerda, y el de Forli que tenía ritmo suficiente en carrera.

Y ninguno de los dos ha defraudado. Tras apagarse el semáforo Márquez salía en cabeza con Dovizioso en paralelo. La Honda defendía la posición, se iba largo y sacaba de la trazada a la Ducati. Fabio Quartararo se ponía en cabeza seguido de Álex Rins y Jack Miller. Dovizioso rápidamente recuperaba la línea e iba adelantando a sus rivales hasta colocarse en cabeza.

A Marc Márquez le costó algo más, pero también llegaba a rueda del italiano un par de giros más tarde. Lo superaba y tiraba para ver si podía dejarlo atrás. Pero pasaban las vueltas y Dovizioso lo marcaba muy de cerca. En algún sector perdía un par de décimas pero las recuperaba rápidamente.

Por detrás Quartararo no podía seguir el ritmo y rodaba en solitario. Valentino Ross, con una buena salida, rodaba cuarto y Maverick Viñales recuperaba terreno a marchas forzadas con Álex Rins a su rueda. Mala suerte para Jack Miller que se iba al suelo y también para Pol Espargaró que se le paraba la moto y propiciaba la caída de Cal Crutchlow.

Pasaban las vueltas y era entonces cuando Dovizioso tomaba el mando de la carrera. Rodaban más lentos, pero ninguno quería dar el tirón definitivo. Ni cuando entramos en las últimas cinco vueltas. Márquez esperaba… cuatro para el final… tres y entonces aprovechando una de las pocas curvas a izquierda del Red Bull Ring pasaba a Dovizioso.

Pero el italiano no se amedrentaba y en cuanto podía, le disputaba la frenada a Márquez que frenaba un poco más largo para cerrar la trayectoria por detrás de la Ducati y salir de la curva de nuevo en cabeza. Así fue la antepenúltima y la penúltima vuelta.

En la última, Dovizioso se mantuvo detrás. Perdió un par de décimas pero las recuperó en el tercer sector y llegaba pegadísimo ya en la curva nueve. Entonces entraron en la última curva. Márquez declaraba que intentó hacer lo mismo que Dovi en 2017, y también lo mismo que en alguna de las curvas anteriores porque sabía que el italiano entraría por dentro y podría irse largo.

Así fue, Dovizioso entraba y salía abierto por el piano, pero muy cerca de la moto de Marc. Tanto que el colín de la Ducati se enganchaba con la protección del freno de la Honda. Esto hizo que Márquez a punto estuviese de irse al suelo aunque por suerte la protección se rompió, pero le impidió cortar la trayectoria por detrás y acelerar antes de Dovizioso.

Pero daba igual, Andrea Dovizioso se merecía este triunfo por delante de Marc Márquez. Fabio Quartararo era tercero con Valentino Rossi cuarto seguido de Maverick Viñales, Alex Rins, Francesco Bagnaia, Miguel Oliveira (mejor KTM en la carrera de casa), Danilo Petrucci y Franco Morbidelli. Aleix Espargaró entraba en décimo cuarta posición. La clasificación final del Gran Premio de Austria era la siguiente.

En la general provisional, Marc Márquez sigue al frente con 230 puntos por los 172 de Andrea Dovizioso (le recorta cinco puntos). Danilo Petrucci es tercero a casi 100 puntos de Marc (136 puntos tiene el italiano). Esta es la clasificación actual.

La próxima carrera se disputará el 25 de agosto con motivo del Gran Premio de Gran Bretaña en el Circuito de Silverstone.