En 1968 los seis socios fundadores de la Comunidad Económica Europea firmaban el fin de los aranceles al comercio entre ellos. De esta manera, se ponían los cimientos del mercado único, haciendo posible el libre tránsito de bienes de consumo entres los miembros de esta comunidad. No obstante, aún faltaban casi dos décadas para que España fuera admitida en ella. Por ello, sólo existían dos maneras de fabricar motocicletas en España sin que éstas se encarecieran abrumadoramente por culpa de las tasas de importación. La primera era realizar diseños nacionales. Vía que, evidentemente, escogieron las marcas locales como Montesa, Sanglas o Derbi. La segunda era fabricar en España bajo licencia de diseñadores extranjeros. Algo que en el automovilismo hizo muy bien SEAT con FIAT, mientras que en el mundo de las dos ruedas fue replicado por la Lambretta Locomoción de Eibar o la Mototrans de Barcelona. Esta última con excelentes resultados gracias, entre otros motivos, a su modelo más exitoso: la Ducati De Luxe 250 de 1963.
Nacida bajo el nombre de Maquitrans con el objeto de gestionar tranvías y demás vehículos de transporte público, Mototrans fue la evolución natural cuando en 1958 decidió centrarse únicamente en la elaboración de motocicletas basadas en los diseños de Ducati. De hecho, aunque en un primer momento incluso tenia que importar de Italia algunas piezas ya hechas, durante los sesenta llegó a elaborar sus propias variantes sobre la base de los diseños proporcionados por el departamento técnico de Fabio Taglioni. Siempre usando como base el famoso y contrastado monocilíndrico de cuatro tiempos que diseñase para la Marianna con accionamiento por engranajes cónicos.
Así las cosas, las Mototrans Ducati fueron muy populares en el segmento más prestacional de las dos ruedas en la España del momento, llegando a tener en la Ducati De Luxe 250 su variante nacional con más éxito al fabricarse hasta 1974. De hecho, se hizo en tiradas de centenares de unidades. Al fin y al cabo, en sus momentos de mayor producción, Mototrans vendía hasta 19.000 motocicletas por año. No obstante, para empezar a entender la mecánica y el diseño de la De Luxe 250 lo mejor será irnos hasta la Italia de 1962. Lugar y momento en el que Ducati presenta la Diana. Una montura deportiva con la que la marca de Bolonia inició toda una saga prolongada a lo largo de los sesenta.
Mototrans se enfocó en fabricar bajo licencia en Barcelona modelos de Ducati, aunque con el tiempo poco a poco fueron introduciendo modificaciones hasta acabar haciendo diseños bastante autónomos en la mecánica
Ducati De Luxe 250, un diseño específico para el mercado español
Ahora que la producción es cada vez más homogénea a nivel internacional, van quedando menos huecos para las variantes nacionales. Algo lógico en la evolución que ha tomado el mercado desde hace ya unas décadas, quitando el espacio que antes ocupaban modelos como la Ducati De Luxe 250 hecha en y para el contexto español. Respecto al motor de la misma, resulta sorprendente comprobar cómo éste se basa en el de 125 cc de la 125 Sport.
El cual guarda relación con el ingenio montado en la Diana, pero que en el caso de España y Mototrans llega hasta los 250 cm3 aumentando progresivamente la cilindrada en diversos modelos. Algo muy meritorio especialmente para el cárter y su capacidad de soportarlo. En lo demás, ya que replicar la Diana en España tendría un efecto muy severo en el precio final – los medios eran los que eran -, Mototrans echó mano de ingenio mecánico tomando también piezas del modelo Élite.
Una 200 cm3 que también había montado una evolución del motor de la 125 Sport. De todos modos, resumiendo las capacidades de la Ducati De Luxe 250 éstas se pueden fijar en unos 20 CV para alcanzar casi 120 kilómetros por hora de velocidad punta. Puntos más o menos constantes en toda la historia del modelo, el cual por otra parte fue cambiando multitud de detalles según el año y las posibilidades logísticas de Mototrans.
Para los setenta esta monocilíndrica ya estaba anticuada, pero durante los sesenta fue una de las mejores opciones en España para los interesados en motocicletas prestacionales
Para empezar a veces se incorporaron guardabarros de otros modelos, e incluso llegó a cambiar el manillar y otros elementos según el año y la evolución de piezas en principio destinadas a otras motocicletas. Una evolución constante en la que, a comienzos de los setenta, se tuvo que admitir finalmente lo desfasado del modelo ya que se estaba entrando de pleno en la edad de los motores multicilíndricos. De hecho, la propia Ducati daba el salto a las biclíndricas en carreras con la presentación en 1971 de la 500 GP. Otro de los hitos con los que, poco a poco, la época dominada por la De Luxe 250 y otras similares iba pasando a la historia.
Miguel Sánchez
Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.Se habría agradecido más información técnica sobre la moto, distribución, dimensiones, problemas de fiabilidad y cierto enlace histórico con las Road y Scrambler, que lo tuvo, y obviar las 2 cil., que fueron otro problema.
Hola JP. Tiene toda la razón, sin duda. No obstante, ya que ésta es una sección breve – y diaria – en un medio digital gratuito, indagar más en cada uno de los modelos resulta imposible a nivel de rentabilidad. Desgraciadamente, lo que nos plantea se echa de menos cada día más a este lado del teclado. En ese sentido,lo que como periodistas le podemos decir es que, de no existir una mayor implicación de la afición para con medios especializados, seguramente dentro de poco todo sea cada vez más efímero y menos cuidado. Es el sino de los tiempos… Leer más »