Conocida como “Fizzie”, la Yamaha FS1-E es una de esas motos que, sin recurrir a la máxima y cara sofisticación, siempre acaban sacando una sonrisa en tu cara. Fue una motillo que combinaba una ingeniería simple pero efectiva, con piezas de repuesto baratas y abundantes, y una velocidad máxima que podía rozar los 90 km/h con un poco de maña mecánica y fe.
La Yamaha FS1-E se lanzó al mercado en 1972 como un ciclomotor de corte deportivo, de las primeras de su clase. Hasta entonces, si querías disfrutar de prestaciones elevadas había que echar el guante a motos de mayor cilindrada; los más jóvenes se tenían que aguantar con aburridos medios de transporte. Pero los de Hamamatsu vieron a una futura generación de apasionados de las dos ruedas y se propusieron fabricar una máquina de 50 cm3 que inspirase el espíritu RACER de los adolescentes.
La Yamaha FS1-E, alias “Fizzie”, era poco más grande que una bicicleta. Medía 1,75 metros de largo y 0,55 metros de ancho, con una masa sobre el asfalto de 70 kilos
Cuando desembarcó en Reino Unido, se convirtió en un éxito instantáneo. El 15 de diciembre de 1971, el ministro de transportes, John Peyton, decretó que todos los jóvenes de 16 años podían viajar solos en ciclomotores. Todos ellos debían de incorporar pedales para ser considerados como tales por la ley hasta 1977 (sí, pedales de bicicleta). De esta forma ya habían solucionado, en parte, el problema de la mayoría de los adolescentes: la falta de dinero. Si nos quedábamos sin gasolina, a hacer piernas.
Originalmente, su motor de dos tiempos refrigerado por aire estaría asociado a una caja de cambios de cinco velocidades, pero debido a las regulaciones europeas se desestimó en favor de una de cuatro. El propulsor de un solo cilindro de 49 cm3 desarrollaba 4,8 CV a 7.000 revoluciones por minuto y 4,88 Nm a 6.500 vueltas; suficiente para alcanzar los 72 km/h de velocidad punta oficial con un mínimo de brío. Para frenar se confiaba en una pareja de tambores de 110 mm, sustituido el del eje delantero en 1975 por un disco de accionamiento hidráulico.
El panel lateral derecho contiene un juego de herramientas básico: alicates, tres llaves, destornillador de doble punta y una toma de corriente
A finales de los 70, la FS1-E perdió sus pedales y fue castrada. La velocidad máxima se limitó a 48 km/h (30 mph). Con la este modelo, Yamaha había conseguido hacer una moto atractiva, tanto desde el punto de vista mecánico como estético, y también personalizable. La “Fizzie” se convirtió en una referente del mercado de accesorios. Pero la belleza de este ciclomotor se encontraba en la facilidad de devolverla a su estado original de manera fácil y económica. Una moto que pude rodar kilómetros y kilómetros con muy pocos recursos, forjando con los años un icono del motociclismo.
El ejemplar de las fotos, de 1974, perteneció a James May -presentador de Top Gear y The Grand Tour- y alcanzó en una subasta en 2015 un valor de 7.475 libras, casi 8.500 euros.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS