Siempre que pensamos en motocicletas americanas, la primera imagen que nos viene a la cabeza es, por lo general, una Harley-Davidson. Algo totalmente normal, pues Harley lleva en esto de fabricar motos más de 100 años. El caso es que la firma de Milwaukee no está sola, en Estados Unidos hay muchos fabricantes de motocicletas, algunos de ellos totalmente desconocidos en Europa porque no se dedican a la producción en serie y centran sus esfuerzos en el mercado local. Sin embargo, uno de los mayores rivales de Harley, Indian Motorcycles, sí que lleva sus productos a todo el mundo, motos de estilo custom/cruiser, por supuesto, pero con una personalidad claramente distinta. Es un custom menos clásico, menos tradicional.
Es cierto que Harley, al haber estado durante más tiempo en activo sin parar, ha ganado mayor fama que Indian Motorcycles, al menos para mucha gente ajena al mando customs, pero Indian es un sello más antiguo que Harley-Davidson. Poco, solo dos años de diferencia – 1901 frente a 1903–, pero al fin y al cabo, comenzó antes su actividad. Actualmente, Indian representa la única opción cruiser auténticamente yankee frente a Harley. Atrás quedaron los años en los que Victory Motorcycles prestaba batalla con motos cuyo talante era llamativamente deportivo. Quizá por eso no lograran calar entre los usuarios típicos de este segmento –por cierto, Victory, por así decirlo, es ahora Indian… –.
Indian Motorcycles, en su renacimiento, ha sabido qué caminos tomar y en qué segmentos pelear, hasta posicionaron un igor que, al parecer, funciona bastante bien, mientras Harley sufre diversos problemas y me como sus ventas caen poco a poco sin que sean capaces de reaccionar. No obstante, también hay que reconocer que Indian ha puesto las cosas muy complicadas a su rival y solo hay que echar un vistazo a uno desus ultras lanzamientos: la nueva Indian Roadmaster Elite, una GT al estilo norteamericano, cuya impactante imagen no deja indiferente a nadie. Una rival directa de las Harley Road Glide Limited, un tipo de motocicleta que la propia Harley denomina ” Grand American Touring”. En esta ocasión, la Indian Roadmaster Elite apunta sin tapujos a las Road Glide CVO. Y como cabe esperar, llega cargada de extras y detalles de todo tipo, y se posiciona como el tope de gama Indian y como el cuarto modelo dentro de la gama Roadmaster – compuesta por la Standard, la Limited y la Dark Horse–.
Como suele ocurrir con este tipo de cruiser, es un modelo de tirada limitada – 350 unidades– y es descaradamente cara –46.490 euros–. Es una de las motos más caras de 2024, al menos de momento y es la Indian más cara de todo el catálogo. Pero claro, es lógico pensar que por ese precio tendremos una motocicleta equipada hasta los topes y con una calidad de primer nivel, y así es. De entrada, su tremendo aspecto, exclusivo de la Roadmaster Elite, procede de una colaboración con dos reputados talleres norteamericanos: Gunslinger Custom Paint (GCP) en Colorado y Custom Painted Vehicles (CPV) en Wisconsin, especialistas que han buscado rendir homenaje al primer tono rojo que Indian introdujo hace 120 años, combinado con zonas en color negro y líneas dorados pintadas a mano. Las llantas, que son de aleación, también son específicas de la Roadmaster Elite.
La cuestión de la decoración es un detalle que se tiene muy en cuenta en el segmento custom, pero no es más que el principio. El asiento, por ejemplo, es calefactable, los faros son LED de tipo adaptativo, tiene un pantalla de siete pulgadas con el sistema Ride Command y conectividad Apple CarPlay, equipo de sonido con Bass Boost –suma un total de 12 altavoces–…
Según Ola Stenegärd, director de diseño de la compañía, “nuestro equipo de diseño siempre está encantado de trabajar en los modelos Elite, porque básicamente se nos da carta blanca para diseñar nuestra propia moto personalizada, pero en lugar de únicamente una, habrá cientos disponibles en todo el mundo. Con cada nuevo modelo Elite, nos basamos en las tendencias de las motos personalizadas para crear algo que no solo sea actual y relevante, sino que esté auténticamente alineado con la marca Indian Motorcycle y complemente el ADN inherente de cada modelo”.
El motor de la Roadmaster Elite se comparte con otros modelos, pero no por ello deja de ser descomunal, al igual que el resto de la moto. Se trata del bicilindrico Thunderstroke 116 –a los yankees les gusta poner nombres ostentosos a sus motores–, con nada menos que 1.890 centímetros cúbicos –116 pulgadas cúbicas, de ahí su nombre– con nada menos que 176 Nm de par. Es el motor refrigerado por aire más grande del mercado, casi perfecto para mover la escandalosa cifra de peso que arroja la Roadmaster Elite: 628 kilos. Cifra, por cierto, que la convierte en la moto más pesada del mundo, un honor un tanto dudoso, todo sea dicho.
Un modelo de tirada limitada, al más puro estilo norteamericano, cuya pintura tarda en completarse alrededor de 24 horas por cada moto.
Javi Martín
Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.COMENTARIOS