Hoy en día el motociclismo de aventura vive una época dorada. Cada vez hay más gente dispuesta a subirse a una moto y emprender viajes infinitos en busca de parajes increibles, cultutras desconocidas y, en general, vivir una experiencia que recordarán durante toda la vida. Para aquellos que no tienen todavía el carné deslimitado, os presentamos sugerencias para vuestra próxima moto de aventura para carné A2.
Al calor de esta tendencia los fabricantes se han puesto las pilas y han empezado a vender motos especializadas para acometer estos largos viajes, capaces de circular por carretera con gran comodidad y capacidad de carga, pero también de salirse de las pistas establecidas y marcar tu propia ruta, para llegar a esos lugares espectaculares y escondidos a los que no podría accederse de otra forma.
Este segmento está copado por grandes nombres: BMW GS, Honda Africa Twin, Triumph Tiger, KTM Adventure, Yamaha Super Teneré… Pero en espíritu RACER Moto sabemos que no todo el mundo tiene ganas de lidiar con motos enormes de más de 220 kg de peso y afrontar sus elevadas cotizaciones.
Además nos gusta hacer apología de las cosas pequeñas y reivindicar motos de menor cilindrada, pero que también son capaces de llevarte al fin del mundo; sólo que un poco más despacio y por un precio bastante más económico. Es por ello que hoy vamos a repasar todas las moto de aventura para carné A2 que nos ofrece el mercado, con menos de 48 CV -sin necesidad de limitarlas-.
Ya os adelanto que no hay muchos modelos que cumplan estos requisitos, pero eso hace que las motos de esta lista sean un poco más especiales y exclusivas. Además hay algunas propuestas muy interesantes y que interpretan el concepto de moto de aventura de una forma diferente a como lo hacen la mayoría de fabricantes en el segmetno maxitrail donde los productos son mucho más homogéneos entre sí.
Honda CRF 250 Rally
Empezamos con un modelo del que ya hablamos hace unas semanas: la Honda CRF 250 Rally. Esta propuesta cumple eso de que las esencias vienen en frasco pequeño. Los japoneses nos proponen una moto de doble propósito con una parte ciclo de primer nivel como su principal punto fuerte: horquilla invertidas de largo recorrido, rueda delantera de 21 pulgadas y neumáticos mixtos.
Su cúpula y su carenado ofrecen la proteción aerodinámica justa para viajar. Además, las geometrías del modelo te permiten mantener una postura erguida y cómoda en cruceros pero también te invita a levantarte sobre los estribos si la conducción offroad se pone exigente. Su mayor pega es un asiento estrecho heredado de las motos de campo y que no resulta ideal si piensas pasar largas horas sobre él.
Su estética está inspirada 100% en las motos de competición que utiliza Honda en el Dakar. La iluminación delantera es de tecnología LED, y las ópticas de forma circular y asimétrica le dan mucha personalidad a la “mirada” de esta moto. Es verla aparcada y tu imaginación echa a volar: ya te ves montado en ella a sus mandos mientras atraviesas el desierto dejando una nube de polvo tras de ti.
Su motor es un monocilíndrico refrigerado por agua de cuatro válvulas y seis velocidades. La potencia alcanza los 24 caballos y el consumo es una de sus bazas fuertes, ya que se pueden conseguir medias ligeramente superiores a 3 l/100 km.
Esta moto es para los aventureros de verdad que prefieran salirse de lo establecido y marcar su propia ruta por pistas de tierra o caminos difíciles. Es el mejor modelo de la lista en lo que a conducción offroad se refiere y con la que más lejos vas a llegar fuera del asfalto.
Por contra, su escasa potencia hará que en carretera no puedas ir muy rápido: su velocidad óptima son 110 km/h. En resumidas cuentas, buena elección si piensas pisar poco el asfalto. Su precio es de 6.050 euros. Puede parecer mucho por una “simple” 250, pero piensa que ese dinero se ha invertido en dotar al modelo de una parte ciclo de primer nivel y unas calidades excelentes, dignas de Honda.
Kawasaki Versys-X 300
La familia Versys de Kawasaki estaba compuestas por motos trail, que en el fondo no eran trail. La Versys 650 y la Versys 1000 son motos SUV: tienen apariencia de todoterreno, pero en el fondo están diseñadas para un uso 100% asfáltico.
Por eso cuando llegó la Kawasaki Versys-X 300 y era una trail de verdad con llantas de radios, rueda delantera de 19 pulgadas y suspensiones de largo recorrido; nos quedamos con cara de sorpresa, puesto que los fabricantes suelen hacer las cosas al revés. Lo habitual es vender motos trail pequeñas pensadas únicamente “para ir a comprar el pan” pero copiando la imagen, y solo la imagen, de sus hermanas mayores, las auténticas aventureras.
La Kawasaki Versys-X 300 es una propuesta muy interesante. Gracias a su bicilínrico refrigerado por agua de 300 cm3 , ocho válvulas y 40 CV, es muy capaz en carretera. Esta moto puede mantener cruceros a 120 km/h sin problema.
Para un uso offroad no es una moto tan capacitada como la Honda, pero aun así se defiende bien. Cuenta con una horquilla convencional de 41 mm de diámetro y un monoamortiguador trasero con muelle regulable en precarga. Las llantas de radios de 19 pulgadas delante y 17 atrás completan el conjunto. Su peso alcanza 175 kg en orden de marcha, lo cual garantiza una buena agilidad cuando los terrenos se tornen complicados.
Otro punto a favor de la Versys-X 300 es que, pese a su pequeño corazón, es una moto razonablemente grande. El carenado es de generosas dimensiones y protege bien frente al viento. Además, el asiento es amplio y el manillar está colocado en una posición elevada por lo que pilotos de diferentes tallas podrán ir cómodos y con espacio suficiente.
La Kawasaki Versys-X 300 tiene una relacion calidad precio excelente. Por 6.200 euros te llevas un motor grande y cómoda, con una potencia muy decente y una parte ciclo que cumple en lo marrón. Además, si con la versión convencional no tienes suficiente, Kawasaki ofrece este modelo con el pack Adventure que añade elementos muy interesantes de cara a realizar grandes viajes.
El pack Adventure incluye paramanos, maletas laterales rígidas, caballete central y un práctico cubre carter para proteger los bajos de la moto. Su precio es de 1.150 euros, un poco caro, pero razonable si tenemos en cuenta que sólo las maletas ya cuestab bastante dinero y que además estamos hablando de accesorios originales Kawasaki, diseñados ex profeso para este modelo.
Royal Enfield Himalayan
Royal Enfield tiene una manera muy particular de entender las motos y el motociclismo. Los indios gastan un estilo muy diferente al de otros fabricantes, tanto a nivel técnico como estético, y como no podía ser de otra forma, la Royal Enfield Himalayan lleva en su ADN todas esas señas de identidad.
Estamos ante una moto con una estética retro, al estilo de las clásicas inglesas de hace cincuenta años. Desde las horquillas delanteras con fuelles pasando por el clásico faro frontal redondo, como una estética naked totalmente desprovista de carenados con todos los órganos mecánicos al aire, nos trasladan diréctamente a otras épocas y contextos históricos.
Pero los guiños al pasado no acaban ahí. El propulsor también es fiel a esa idea retro y, que yo sepa, no hay ningún otro fabricante ofreciendo nada parecido. Es un monocilíndrico refrigerado por aire de 410 cm3 con una culata SOHC de dos válvulas. Sorprente también por la larga carrera de su pistón: 84 mm.
En cristiano todo esto quiere decir que estamos ante un motor percherón de corte tranquilo y al que le gusta girar bajo de vueltas, haciendo el trabajo a base de pocas pistonadas pero contundentes. Su potencia máxima es de 24,5 CV a 6.500 vueltas y tiene un par motor de 32 Nm.
Estas cifras pueden sorprender por ser demasiado bajas para lo que nos tiene acostumbrado el mundillo de las dos ruedas, pero como os he dicho antes, lo de Royal Enfield es un mundo a parte, ni mejor ni peor, simplemente diferente. Es otra filosofía de andar en moto más traquila y relajada pero igualmente disfrutable.
A parte de esto, la Royal Enfield Himalaya sorprende por su construcción fuerte y robusta. Es verla y me recuerda a esa época en que las cosas se hacían de otra forma, a base de metal, y de cuando el plástico aún no había invadido nuestras vidas. Desgraciadamente, el peso de hacer las cosas al estilo “tradicional” es considerable: son 185 kg de moto en vacío.
El chasis y el basculante están construidos en acero. Cuenta con una horquilla convencional de 41 mm de diámetro y 200 mm de recorrido. Atrás se recurre a un monoamortiguador central con 180 mm de recorrido. Por último las llantas son de radios y las medidas de sus neumáticos son totalmente offroad: 90/9/21 para el eje delantero y 120/90/17 atrás.
La Royal Enfield Himalayan es para toda esa gente que quiere aventura, pero con un toque nostálgico. Viajar con ella recuerda a cómo era viajar hace muchos años cuando todo era mucho más complicado y emocionante que hoy en día. Puede que la velocidad no sea su fuerte, pero por 4.400 euros es la más barata de la lista y en el fondo, hasta en el fin del mundo es importante conservar ese toque de elegancia vintage.
Benelli TRK 502 X
La Benelli TRK 502 X, que se presentó hace tan solo unas semanas, es posiblemente la propuesta más completa e interesante de esta lista. Los italianos no han querido arriesgar con fórmulas extrañas y han diseñado una trail de manual que sigue a pies juntillas lo que están haciendo los demás fabricantes de motos en el segmento trail de mayores cilindradas.
La Benelli TRK 502 X ofrece un conjunto muy equilibrado y completo. El motor es un bicilíndrico en linea de 500 cm3 refrigerado por agua que da la potencia máxima permitida para el carné A2: 48 CV, y está unido a una caja de cambios de seis velocidades.
La parte ciclo es la otra baza fuerte del modelo. Es una moto grande y aparente. Gracias a sus voluminosas fibras, el piloto está muy bien protegido del viento y las inclemencias del tiempo. El asiento es amplio y mullido, mientras que el manillar se sitúa en una posición elevada. Monta una horquilla invertida de 50 mmy una pareja de discos de freno de 320 mm en la rueda delantera.
Pese a ser una moto apta para el carné intermedio, la Benelli TRK 502 X es una auténtica devoradora de kilómetros. El puesto de conducción es amplio y cómodo, la postura a sus mandos es erguida y descandada, y los 48 CV son más que suficientes para llevarte a velocidades legales hasta el fin del mundo. Su depósito de 20 litros es otro punto a favor: permite recorrer más de 400 kilómetros sin repostar.
Quizá su faceta más gris sea el terreno offroad. Estamos ante una moto grande y aparatosa que no va a ir tan bien por lo marrón, sobre todo por caminos angostos y pistas muy técnicas. Los 213 kg que pesa la moto en vacio tampoco ayudan a la maniobrabilidad en esos ámbitos.
Este modelo se vende a un precio de 6.400 euros. Por esa cantidad te llevas una moto de planteamiento similar a los grandes referentes del trail como la Suzuki V-Strom o la BMW F 800 GS, solo que con unos 30 caballos menos. ¿Qué más se puede pedir?
Entonces, ¿cuál es mejor?
Pues como siempre, no hay un ganador claro. Todo depende del comprador y de qué necesidades o caracterísitcas priorice a cambio de sacrificar otras. De la Honda se puede destacar su habilidad offroad, es la más capaz de la lista en este ambito, lo cual la vuelve una moto demasiado incómoda en cruceros por carretera.
La Royal Enfield nos cautivará por su estética retro y su mecánica sencilla. Es tu moto si buscas un concepto diferente y te gusta el tacto del monocilíndrico girando a bajas vueltas. Por el contrario, sus 24,5 caballos quizá se te queden un poco cortos para viajar por autovía.
Dejo para el final las dos opciones más conservadoras respecto a cómo debería de ser una trail. La Benelli TRK 502 X es la moto más completa y la más equilibrada de la comparativa, toca todos los palos y desde luego es la mejor rutera por carretera, aunque la que peor se comporta cuando abandonas esta.
La Kawasaki ofrece la confianza y buen hacer al que nos tiene acostumbrados el fabricante japonés. Su motor de pequeña cilindrada también casa mejor con el espíritu de esta comparativa: encontrar auténticos modelos aventureros que sean ligeros, sencillos de conducir e ideales para dar tus primeros pasos en algo tan bonito como son los viajes en moto.
Gonzalo Lara Camarón
Ingeniero de software a tiempo completo y apasionado del motor en mis ratos libres. Los coches me gustan desde que tengo memoria, pero fue descubrir las motos y la “enfermedad” fue a peor. Mi sueño es recorrer todos los rincones del mundo sobre dos ruedas.COMENTARIOS