Siempre ha existido una fascinación por intentar que las motocicletas tengan tracción total. Inventos ha habido muchos a lo largo de los años y os hemos hablado de alguna, como por ejemplo de la Drysdale Dryvtech 2x2x2 o la Rokon Trail-Breaker. Y hoy os traemos otro desarrollado en la segunda mitad de los años 80 por los gemelos franceses Franck y Patrick Savard. Hablamos de la Savard 2×2.
Ambos hermanos era unos consumados pilotos que se defendían por igual en velocidad y en tierra. Uno consiguió hacerse con el título francés de velocidad en el 76 y el otro en el 78. Participaban en la famosa carrera por la playa de Le Touquet y, por supuesto, también le daban al supermotard, una especialidad que por aquellos años empezaba a calar con mucha fuerza en el país galo, Le Mans o incluso el karting, donde ambos se hacen con el título. Entre carrera y carrera contaban además con un taller de motocicletas en Saint-Brieuc, en el que fabricaban piezas a medida para todo tipo de vehículos.
Entre 1985 y 1986, Patrick se fue a trabajar junto al proyecto de la Elf 3. Curiosamente esta motocicleta también fue desarrollada en sus comienzos por otro ingeniero francés, André de Cortanze, aunque posteriormente se involucraría Honda. Para Patrick, la idea era buena pero no estaba de acuerdo con el diseño asimétrico de la rueda delantera por lo que la finalizar su trabajo con ellos, vuelve a casa y empieza a desarrollar un tren delantero alternativo.
Una vez que lo tiene finalizado se da cuenta que la nueva geometría y su funcionamiento les permite incluir un sistema mecánico de tracción a la rueda delantera. El sistema era muy sencillo: el piñón de salida de la caja de cambios contaba con un engranaje doble y desde aquí salía una cadena para la corona trasera y otra era reenviada mediante otros ejes intermedios a la rueda delantera.
Rápidamente la moto demostró su eficacia fuera del asfalto. De hecho, la Savard 2×2 no la podemos considerar como una moto sino como un sistema de tracción y suspensión delantera que se podían adaptar a un gran número de motos. Fue montada en motocicletas Husqvarna, CR 500 e incluso alguna cuatro tiempos con motor de la 600 XT. Pero el verdadero problema llegó cuando empezaron a utilizarla sobre asfalto, en las competiciones de supermotard.
Aunque con la moto recta o relativamente poco inclinada funcionaba bien, al buscar los límites la moto tendía a tirar demasiado de la rueda delantera, con lo que o bien el piloto acababa en el suelo o iba abriendo irremediablemente su trazada. Debido a que se trataba de una transmisión mecánica, era imposible hacer que la tracción a la rueda delantera variase en función de las necesidades.
Se llegó a fabricar alguna versión para competir en el Dakar, el Atlas o el Rally de los Faraones ,pero finalmente el proyecto no siguió adelante, aunque abrió la puertas a otras motocicletas que llegaron posteriormente intentando llevar al éxito un sistema de tracción total.
Fotografía: Leguidevert
Ender
Japan Rules!!COMENTARIOS