Ya sabéis que en espíritu RACER moto nos gusta enlazar las historias. Los años nos han hecho ver que las cosas no ocurren por casualidad, y todas ellas tienen un motivo. A veces es una inquietud, alguien que te despierta una curiosidad o un proyecto inacabado que continúa en otro lugar. Esto último ocurre con nuestra protagonista de hoy, la Moto Française MF 650 R.

Si recordáis, a principios de esta semana os hablamos de la BFG 1300. Una moto francesa que contaba como un nada habitual motor de coche en sus entrañas. Concretamente el propulsor de cuatro cilindros bóxer de un Citröen GS. Los artífices de ella habían sido Louis Boccardo, Dominique Favario y Thierry Grange.

Pues bien, antes de que esta moto llegase a las exposiciones, Louis Boccardo prefirió desmarcarse para trabajar por libre. Lo cierto es que desconocemos los motivos (y es algo a lo que tampoco damos importancia), pero lo que sí sabemos es que cuando BFG se planteó fabricar su primera moto, lo hizo pensando en lanzar uno de cilindrada media. Esta idea, concepto o prototipo primigenio fue el que lanzó Boccardo tras fundar Moto Française (MF).

Moto Française MF 650 R

Realmente el concepto era idéntico al de BFG, es decir, montar un motor de coche francés en una moto diseñada y fabricada en el país galo. La MF empezó a fraguarse a finales de los años 70. El punto de partida fue en este caso el motor de un Citröen Visa. Su motor de dos cilindros bóxer partía de la base del que se había usado antes en el Citröen 2CV, por lo que era fiable, sencillo de reparar y ligero al contar con refrigeración por aire y aceite.

Cubicaba 652 cc y su alimentación era a través de un carburador Solex. La potencia era de 36 CV a 5.500 RPM. De nuevo su gran baza era el par motor que era capaz de desarrollar, sobre todo a bajas vueltas. El máximo llegaba hasta los 53 Nm a solamente 3.500 vueltas. Pensemos que por ejemplo una Kawasaki ER6 de 650 cc ofrece 72 CV (el doble) pero el par motor solamente es ligeramente superior (64 Nm) y lo ofrece mucho más arriba.

Tras diseñar el chasis, Louis Boccardo volvió a buscar aprovechar al máximo componentes ya desarrollados. En este caso sí llegó a un acuerdo con Moto Guzzi y poder así acoplar la transmisión por cardan y la caja de cambios de una Moto Guzzi V 50. La parte de ciclo fue directamente adquirida a fabricantes italianos.

Moto Française concibió tres versiones con la misma base común: la MF 650 R (naked), la MF 650 RTL (turística con un faro muy Katana) y una MF 650 TC (trail) de la que únicamente se fabricó un prototipo. Las tres las podéis ver en la foto de portada. Respecto a su rival francés, la BFG, lo cierto es que competían en ligas diferentes. Una era una moto turística de gran cilindrada y esta era una ligera (205 kg) sport turismo.

Pero si la comparamos con otros modelos europeos con los que realmente competía, como por ejemplo BMW, lo cierto es que se quedaba escasa de potencia respecto a ellas. Tras dos años de producción y menos de 100 unidades construidas de la MF 650 R/RTL, el proyecto pasó a mejor vida.

Pero este no fue el último proyecto de Boccardo con motor de coche. Pero eso os lo contaremos en el próximo capítulo.