Dentro de la historia mecánica del motociclismo las monturas con cuatro cilindros representan una de las sagas más prolíficas e interesantes. Además, éstas se encuentran plenamente enraizadas en la historia de marcas tan significativas como Indian. Sin embargo, gran parte de los diseños que la casa estadounidense implementó en este sentido hunden sus raíces en la empresa que absorbieron en 1927. Un hecho en el que la ACE Four 1229 se alza como un icono esencial, representando al mismo tiempo uno de los mejores y más interesantes hitos para el motociclismo americano previo a la Segunda Guerra Mundial. Pero vayamos por partes.
Así las cosas, lo mejor será situarnos en los años diez del siglo pasado. Concretamente en la ciudad que, durante décadas, fue el principal centro para la industria automotriz al otro lado del Atlántico. Detroit. Y es que allí fundó en 1911 su propia empresa William G. Henderson. Especializado en motores con cuatro cilindros en línea, sus motocicletas llegaron a ser las más imponentes y prestacionales en el mercado de aquel momento. De hecho, eran ambicionadas tanto por los amantes de la velocidad como por los departamentos de policía dedicados a perseguirlos. Es más, revisando documentos de la época uno puede darse cuenta fácilmente de que eran “ lo más rápido que se podía encontrar en la carretera “.
Con todo ello, en 1917 la empresa ya había crecido tanto que atraía la atención de capitales tan potentes como el representado por Excelsior. La marca de motocicletas instalada en Chicago y que, al tiempo, era una de las más prolíficas a la hora de exportar al lejano mercado europeo. Llegados a este punto, ¿qué es lo que se buscaba con esta operación? Bueno, por parte de Henderson encontrar el necesario apoyo financiero para seguir creciendo – paradoja que siempre se suele dar en la marcha de toda empresa independiente con ambiciones – y, por la de Excelsior, adquirir la tecnología punta representada por los exquisitos motores de cuatro cilindros ya nombrados.
Esta fue una de las motocicletas más prestacionales de los Estados Unidos en la época, siendo la base para las Indian de cuatro cilindros
ACE Four 1229, una de las mejores de su época
Siempre que se produce una fusión empresarial suele haber problemas con la gestión del nuevo rumbo. Y éstas siempre las suelen perder quienes han sido absorbidos por la parte más potente del accionariado. En base a esta lógica, Henderson empezó a tener serios problemas con sus recién estrenados patronos nada más comenzar su nueva época en Chicago. Así las cosas, en 1919 no pudo más, por lo que marchó hasta la Costa Este de cara a fundar ACE. Su nueva marca propia.
Eso sí, desde un punto de vista tecnológico el problema era mayúsculo. No n vano, Henderson le había entregado el uso de todas sus patentes a Henderson. De esta manera, sus diseños no podían replicar a los de la marca de Chicago – creados tiempo atrás por él mismo – aunque, al mismo tiempo, debían seguir la exquisita lógica de los cuatro cilindros para seguir compitiendo así en lo más prestacional del motociclismo.
Con todo ello, Henderson tuvo que crear desde cero unos motores con cuatro cilindros que, a fin de evitar problemas legales, no se parecieran en nada a las patentes ya a nombre de Excelsior. Obviamente, el esfuerzo era mayúsculo. No obstante, nuestro intrépido diseñador consiguió lanzar a los pocos meses su primera motocicleta ACE. Por cierto, capaz de competir con la gama ofertada por Indian en aquellos años. Además, se implicó tanto en el desarrollo que en 1922 fue mortalmente arrollado por un camión mientras probaba el prototipo de la Sporting Solo.
Con algo menos de 200 kilos era una de las cuatro cilindros más ligeras del momento, deseada tanto por ladrones como por policías
Una de las motocicletas básicas para seducir a Indian, la cual terminó comprando ACE en 1927 con el fin de usar sus motores de cuatro cilindros – con evidentes variaciones – en todos sus modelos. Es decir, para entender uno de los mayores saltos tecnológicos protagonizados por el sempiterno rival de Harley-Davidson hay que comprender todo lo que William G. Henderson venía haciendo desde comienzos de los años diez. Además, las ACE como esta 1229 Four – como hemos dicho, uno de los mejores modelos de la marca – llegaron a un peso de tan sólo 195 kilos. Realmente escasos para las mucho más pesadas opciones de cuatro cilindros ofertadas por la competencia. Una de las características básicas para entender cómo lograban rebasar fácilmente los 136 kilómetros por hora. Una de las motocicletas más veloces de su época que, hoy en día, representa una pieza de colección altamente estimada en cualquier subasta .
Miguel Sánchez
Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.COMENTARIOS