La Confederate P120 Fighter es una moto cuanto menos llamativa. Un diseño exquisito y un mimo por el detalle digno del mejor de los modistas. Estética y funcionalidad unida en un mismo chasis monocasco de aluminio soldado con un V-Twin de gran cilindrada entre ambos ejes. Una máquina construida artesanalmente de la que tan solo 50 afortunados pueden disfrutar.
Confederate Motorcycles lleva en la industria desde 1991, y hace un par de años anunció sus planes de rebautizarse a Curtiss Motorcycles, centrando su producción en motos completamente eléctricas. La empresa fundada por Matt Chambers en Louisana –ahora asentada en Alabama– siempre se ha caracterizado por sus diseños fuera de lo común, y su exclusividad. Son motos de decenas de miles de euros donde los gastos de desarrollo y producción pasan a un segundo plano. Nadie confundirá una Confederate con otro modelo, es la típica motocicleta que podría llevar Belcebú en sus paseos nocturnos por la autopista del infierno.
Todo en esta moto es metálico, no hay plásticos por ningún lado. Una viga superior hace de depósito de combustible y, sobre ella, aparece grabado el número de serie de cada modelo. Esta columna tubular define el diseño de la moto estructural y estéticamente. El motor se mantiene en su lugar mediante un par de placas de aluminio mecanizado atornilladas a esa columna. Delante, una horquilla construida en aluminio aeronáutico en la que la dirección y la amortiguación están separadas por un entramado de tubos. En la zaga se opta por algo más convencional: monoamortiguador con excéntricas en el eje de la rueda trasera para regular la tensión de la cadena.
“Queríamos crear un chasis modular compuesto por una serie de placas de aluminio que atornillaran el motor a la columna vertebral central como un elemento estructural para producir una estructura extremadamente rígida” – Ed Jacobs, jefe de diseño de la Confederate P120 Fighter
El motor está ofrecido por la también norteamericana JIMS, especialista en propulsores bicilíndricos de gran cilindrada. La Confederate P120 Fighter monta un V2 a 45 grados de 1.965 cm3, con cuatro válvulas por cilindro y refrigeración líquida. El resultado son 160 CV a 5.800 RPM y 196 Nm a 4.500 RPM, y se transmiten al eje posterior a través de una caja de cambios manual de cinco velocidades. Las llantas, de fibra de carbono, cuentan con un diámetro de 19 pulgadas delante y 18 en la zaga, asentadas sobre neumáticos Pirelli Diablo de 120 y 240 milímetros de ancho respectivamente.
A pesar de su rompedor impacto visual, la P120 Fighter no ha sido concebida para realizar viajes largos. Un asiento minúsculo o un depósito de gasolina de 15 litros no invitan a pasar largas estancias a sus lomos. Sus algo más de 200 kilos de peso en seco quedan detenidos por una pareja de discos de freno (de 300 mm y cuatro pistones delante, y de 260 mm y dos pistones) firmados por Brembo. Es necesario frenar con un mínimo de garantías cuando puedes volar a ras de suelo a más de 250 km/h.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS