Yamaha Virago. Seguramente que con solo mencionar este nombre, muchos moteros no podrán evitar una ligera sonrisa en su cara, mientras que otros empezarán recordar algunos momentos en los que soñaban con tener esta moto. Es algo lógico, aunque es poco habitual que una motocicleta del segmento custom haya obtenido tanta fama y tanta imagen como la conseguida por esta Yamaha.

La Yamaha Virago apareció en los 80 y era la primera custom de la firma japonesa, equipada con un motor de dos cilindros y cuatro tiempos, y estuvo en el mercado nada menos que 26 años. Muy pocos modelos pueden presumir de haber tenido una vida comercial tan notablemente larga, lo que permitió que su fama siguiera creciendo, al igual que los usuarios y los seguidores de la marca.

En lo que respecta a los usuarios, también se ve afectado por las diferentes versiones que se pusieron en circulación. La primera Virago en aparecer fue la 750, pero luego llegó la Virago 535, la Virago 900 y por supuesto, la Yamaha Virago 1100. Pero no solo eso, también hubo versiones de poca cilindrada, como una 250 y la casi siempre olvidada Yamaha XV 125 Virago. Es decir, es posible que cualquier motero que empezara con la Virago 125 como primera moto, pasara toda su vida en carretera sobre la misma moto.

Curiosamente, la Yamaha Virago 125 cuadraría muy bien con lo que tenemos actualmente en el segmento del cuarto de litro, tanto por pretensiones como por prestaciones y calidad de fabricación. El motor, por ejemplo, es un dos cilindros en V cuatro tiempos y refrigerado por aire, que primero rendía 11 CV y luego pasó a anunciar 13 CV, con los que podía alcanzar entre 100 y 110 km/h –esto último con las condiciones muy a su favor, claro está–. Lo único que no estaría a la orden del día sería la alimentación por carburadores.

Estéticamente, la Yamaha Virago 125 mantenía todos los rasgos que habían hecho famosas a sus hermanas mayores, y, por tanto, su personalidad también sería un punto fuerte a día de hoy, con infinidad de motos “vintage” en la categoría de los 125 centímetros cúbicos.

De todas las versiones de la Yamaha Virago, la 125 es la menos numerosa. Se añadió a la gama a finales de los 90, en 1996, y se fabricó hasta el año 2002. Eso hace que sean difíciles de encontrar en el mercado de segunda mano, aunque sus precios, por suerte para quien le guste el modelo, están en la media de las 125. Hay motos como la Honda Shadow 125 que son bastante más caras –y más modernas–.