Durante más de 20 años todos los cascos que usamos al conducir una motocicleta cuentan con una homologación denominada ECE 22.05. Pero dentro de dos años esta norma se actualizará a la ECE 22.06, introduciendo un buen número de cambios con los que se busca crear unos cascos que nos protejan más y mejor.

La propuesta (que ya se puede consultar en este enlace) se basa en dos cambios importantes. Por un lado en las propias pruebas de impacto y, por otro, elementos accesoriables a la propia estructura que forman parte de ellos y que se han ido extendiendo su uso en la última década.

Para empezar la ECE 22.06 prevé un mayor número de impactos a diferentes velocidades, tanto de alta como de baja energía. Aunque sea un poco difícil de comprender, la cabeza no reacciona igual cuando sufrimos un impacto de alta energía/velocidad o uno de baja. Para el primer caso el casco debe ser más rígido que en el segundo por lo que puede provocar que el cerebro sufra más daños ya que nada disipa esa energía.

Los fabricantes de cascos utilizan en la calota interna el denominado EPS multidensidad que, por construcción, presenta diferentes tipos de absorción dependiendo de la fuerza del impacto. Esto deberá ser ahora un estándar para todas las marcas, independientemente del coste del casco.

Las pruebas de impacto se realizarán también contra superficies inclinadas. Esto es debido porque en los últimos años se han detectado lesiones cerebrales derivadas de los movimientos de torsión que inciden en la cabeza en el momento del impacto.

Por otro lado está el tema de accesorios, que incluye desde los intercomunicadores a las pantallas solares internas o viseras exteriores. En ese caso las pruebas se realizarán tanto con estos accesorios instalados (siempre que sean oficiales de la marca) como sin ellos.

Mención especial a los visores solares internos, tanto a la forma en la que se deben operar como en la cantidad de luz que deben pasar. Hasta ahora no había una regulación concreta pero con la ECE 22.06 estos deben reducir la cantidad de luz en un 30% (con el fin de que no sea necesario usar gafas) y al mismo tiempo lucir una inscripción que deje claro que solamente se puede usar por el día.

Hay también cambios en cuanto a la resistencia de las pantallas frente a impactos de objetos de pequeño tamaño como piedras, o las pruebas que se realizan a los cascos modulares. También sobre la incorporación de elementos reflectantes en la superficie del casco, tanto frontal como lateral y posterior.

De seguir el desarrollo previsto, la entrada en vigor de la ECE 22.06 será dentro de dos años. A partir de esa fecha no se podrán vender de forma legal cascos con la homologación ECE 22.05. Seguramente estas pruebas hagan incrementar el precio de los cascos, sobre todo aquellos más económicos.