La VOGE ER-10 cuenta con un chasis doble viga de aluminio, material que también se utiliza en el basculante aunque en este caso es mixto, pues utiliza un alma interno en acero. No suele ser habitual que las motos de cilindradas bajas recurran al aluminio. Lo normal es que utilicen el acero, mucho más barato. Sin embargo, la elección de este material permite ahorrar mucho peso, compensando así el de la batería eléctrica.
Llama la atención el diseño del subchasis, que parece mantener el asiento flotando sobre la moto. El tren motriz, mucho más pequeño que en un motor de combustión, permite que el voladizo trasero arranque muy por delante del eje de pivotaje del basculante, aumentando la sensación visual de ligereza. La carrocería está fabricada en fibra de vidrio.
El motor eléctrico está ubicado en una posición que no suele ser demasiado habitual. Está anclado directamente al basculante, lo que permite que la tensión de la cadena de transmisión sea constante y, con ello, menores pérdidas de energía y una mayor vida útil, pues es independiente del movimiento de la suspensión trasera.
El motor de la VOGE ER-10 está suministrado por JWT. De tipo imán permanente síncrono y trifásico, cuenta además con refrigeración líquida. El circuito es el que también se encarga de mantener la temperatura de la electrónica del controlador. Esto redunda en una mayor eficiencia durante más tiempo, al estabilizar la temperatura en aquellos momentos en los que se le exige el máximo rendimiento al motor.
Su potencia nominal es de 6 kW (8,2 CV) a 4.660 rpm, pero puede alcanzar un pico de 8,9 kW (12,1 CV) a 3.500 rpm. Como es habitual, el par motor es mucho más elevado que el de una moto de 125 cc, alcanzando los 190 Nm al eje del motor y 41 Nm a la rueda.
Para su alimentación, se recurre a una batería Samsung de tipo 15650, con un total de 384 celdas de 2.600 mAh y que funciona a un voltaje de 60 V. Su capacidad es de 70 Ah, y pesa en total 30 kg. Se suministra con un cargador de alta intensidad de carga (20 A), con lo que se consigue que una carga completa se pueda realizar en únicamente cuatro horas.
Para proteger la integridad de la batería, ser recurre a un sistema de gestión BMS, la cual monitoriza la totalidad de las celdas ante sobrecargas o descargas, incluso cortocircuitos, con un equilibrado que aísla la celda afectada para que todo siga funcionando. El cableado está reducido al máximo, gracias al uso de protocolos de comunicación CAN Bus, en el que solamente es necesario un solo cable.
La VOGE ER-10 cuenta con dos modos de conducción: uno económico en el cual electrónicamente está limitada a 50 km/h (velocidad máxima en ciudad), y otro deportivo en el que puede alcanzar el máximo, cifrado en 90 km/h. La autonomía según normas WTC es de 130 km, correspondiente a un uso en ciudad. En uso combinado (media de 50 km/h), la autonomía es de 100 km y en carretera a máxima velocidad, la autonomía se reduce hasta los 45 km. Es posible ganar aproximadamente un 5% de autonomía si se aprovecha la frenada regenerativa con la retención del motor al cortas gas, disponible tanto en pendientes descendentes como durante las fases de frenado.
Si saltamos a la parte de ciclo, la ER-10 recurre a una horquilla invertida con barras de 37 mm y 115 mm de recorrido, acompañada por un monoamortiguador con bieletas, ajuste en precarga y 58 mm de recorrido en el tren posterior. El disco delantero es de 280 mm, y sobre él actúa una pinza de dos pistones flotante. Detrás el disco es de 220 mm. El ABS de serie es de doble canal. Para terminar con la parte dinámica, las llantas de aleación son de 17″, y montan neumáticos delanteros en medida 110/70 y 140/60.
La iluminación es completamente LED, con un faro de dos módulos de alta intensidad superpuestos, que hacen las funciones de luz de cruce (corta) y carretera (larga). Dos focos DRL (luz diurna/posición), se sitúan por encima y a ambos lados del faro principal.
Toda la información la podemos ver en un cuadro de instrumentación formado por dos pantallas digitales con retroiluminación adaptada a la luz exterior por medio de un sensor crepuscular. La pantalla principal integra la información más importante para consultar: velocímetro, nivel de carga de la batería en forma porcentual y gráfica, autonomía estimada y reloj horario. En la secundaria se muestran avisos de mantenimiento, modo de conducción y los cuentakilómetros total y parcial simultáneamente además de siete testigos luminosos.
Dos detalles interesantes son, por un lado el uso de una llave inteligente que permite activar la moto a distancia gracias a los dos botones integrados, además de un tercero que sirve de localizador para cuando estamos estacionados. Encima de la batería y en lo que sería un falso depósito, tenemos un compartimento de carga de 16 litros que incluye una toma de corriente USB.
La VOGE ER-10 está disponible en dos colores: blanco y negro. Ya está disponible en los concesionarios oficiales a un precio de 6.295 euros. Como promoción de lanzamiento, es posible acceder a una financiación al 0% TAE sin intereses y a 36 meses, con una entrada de 1.795 euros y una cuota de 125 euros al mes. En el siguiente enlace os podéis descargar su catálogo
Ender
Japan Rules!!COMENTARIOS