Bianchi es, en cierto modo, lo que habría sido la Honda italiana. Empezó fabricando bicicletas en 1880 y fue el primer fabricante italiano de motocicletas en 1901, pero también fabricó coches, camiones y motores de fuera borda y aviación. En lo relativo al motociclismo fue muy exitoso la segunda mitad de los 20. Tazio Nuvolari ganó el campeonato europeo de 1925 y las Bianchi fueron pilotadas por gente como Amilcare Moretti, Mario Ghersi, Karl Kodric, Gino Zanchetta, Alberto Ascari…
Nuestra moto del día, la Bianchi ES 250 o ES 250/1, era técnicamente una buena moto, pero llegó en muy mal momento, 1937. La Italia de Mussolini estaba participando en la Guerra Civil de España, prolegómeno de la Segunda Guerra Mundial, y la Alemania nazi estaba muy subidita en sus pretensiones. Las democracias intentaban evitar el desastre con un poco de diplomacia con los fascismos en auge.
Esta monocilíndrica recurría a una solución ya probada, un motor monocilíndrico de 248 cc con árbol de levas cenital y distribución por varilla (OHV) de dos válvulas y muelles al descubierto. Bianchi ya había tenido motores V2 y compitió con motores de dóble árbol de levas (DOHC).
En el bastidor de cuna simple abierta el motor de cuatro tiempos va integrado, con el cárter de cara al aire para una óptima refrigeración del aceite. Entregaba una potencia de 10 CV (7,35 kW) a 4.800 RPM, suficiente para alcanzar los 105-108 km/h con su cambio de cuatro velocidades. La suspensión corría a cargo de horquillas de acero prensado, amortiguadores de muelles para el asiento y de émbolo para la rueda trasera. Fijaos en el triángulo sobre el eje.
Las salidas de escape estaban en el frontal del cilindro, con un tubo de acero por cada lado. Sendos frenos de tambor detenenían las ruedas con llantas de radios, guarecidas con generosos guardabarros. Era posible llevar a un pasajero en un asiento simbólico encima de la rueda trasera. No era especialmente pesada, 148 kg.
Por lo visto no se fabricó más que en 1937, así que hubo muy poquitas unidades y son realmente escasas, así como la información que se ha conservado sobre ellas. No tuvo sucesora después de la guerra. La historia de Bianchi como fabricante de motocicletas terminó en 1967, cuando abandonó la actividad, pero ha sobrevivido en el negocio de la bicicleta.
Si pasáis por Alemania podréis ver un ejemplar en el Zweirad Museum (Museo de las dos ruedas) de Neckarsulm, en el mismo azul claro de las imágenes (característico de Bianchi), junto a una nutrida colección de motos alemanas de esa época.
Javier Costas
Me gustan los coches desde que tengo uso de razón (o antes), las motos siempre me han inspirado mucho respeto, y sin saber cómo, ya me han enganchado.COMENTARIOS