Seguro que a muchos se les ocurriría cualquier otra forma menos fría de celebrar 120 años de historia. Pero a Royal Enfield no. Ellos pensaron que si eres la marca de motocicletas más antigua del mundo en producción continua, desde nada menos que 1901, había que hacer algo a lo grande. Y vaya si lo han conseguido, pues han plantado nada menos que dos Royal Enfield Himalayan en el Polo Sur. La expedición Royal Enfield 90 South, de las que os hablamos hace algunas semanas, ha sido todo un éxito.
Santosh Vijay Kumar (responsable de la comunidad de RE) y Dean Coxson (ingeniero sénior de desarrollo de productos), fueron los dos intrépidos pilotos que el pasado 26 de noviembre llegaron a Novo, donde hombres y máquinas se enfrentaron a un periodo de aclimatación intentando acostumbrarse a las gélidas temperaturas antárticas. Vale que en el hemisferio sur ahora mismo es verano, pero seguro que en el verano de allí hace “más rasca” que en el invierno de la India.
Desde allí realizaron un viaje de 3.200 km hasta la estación de investigación que la India tiene en la Antártida, situada en la plataforma de hielo Ross. Fueron en total nueve días de viaje, seguido de un periodo de descanso antes de enfrentarse al tramo más duro, el cual les llevaría a asaltar definitivamente el Polo Sur.
La intención era partir desde el los 86º Sur, pero una inesperada ventisca les obligó a cambiar los planes iniciales previstos, arrancando desde la posición 87º Sur. Tras algunas dificultades en los momento iniciales y tener que tomar un desvío, el 16 de diciembre llegaban a la meta y conseguían hacer historia. En total, 770 km recorridos hasta la estación Amundsen-Scott.
Pero el reto Royal Enfield 90 South todavía no acababa aquí. En estas aventuras épicas en las que literalmente te juegas la vida, es importante llegar pero más importante es no bajar la guardia y llegar sano y salvo a casa. Santosh y Dean todavía tuvieron que continuar hasta el Campamento Glaciar Unión, a donde arribaron el día 20 y desde allí, un avión les recogió y pudo darse por finalizada la aventura.
Lo que más sorprende es que las Royal Enfield Himalayan no pasaron por grandes labores de preparación. Eran motos casi de estricta serie, y únicamente contaban con pequeñas modificaciones que le permitirían funcionar en una condiciones tan extremas como la Antártida, donde las temperaturas han estado siempre entre los -25 ºC y los -35 ºC. Unas llantas sin cámara, neumáticos de tacos, una rueda delantera más pequeña y una electrónica reforzada para que sea capaz de aguantar esas temperaturas. Por supuesto no estaban solos, pues en todo momento iban acompañados por varios camiones árticos que se encargaban de transportar el equipo y las provisiones.
Otro punto a destacar en el Royal Enfield 90 South fue el máximo respeto por el medio ambiente. Bajo la iniciativa de Royal Enfield conocida como #LeaveEveryPlaceBetter, el equipo se aseguró de que todos los residuos generados (incluidos los humanos) fuesen recogidos, pudiendo ser posteriormente eliminados de forma adecuada. Incluso el impacto ecológico de las motos se mantuvo al mínimo, circulando por una pista de nieve compacta.
Bonus: podéis hacer un viaje en el tiempo y emular a estos dos intrépidos aventureros con el juego 90 South – The Game. Ideal para echar un rato divertido.
Ender
Japan Rules!!COMENTARIOS