Si hacéis memoria, es más que probable que os acordaréis del Cushman 53 Airborne Scooter. Un vehículo militar desarrollado para el ejercito norteamericano y que podía ser lanzado en paracaídas. Pero antes de este modelo, la empresa que lo había desarrollado, Cushman, ya tenía experiencia fabricando scooter civiles. En nuestro repaso a la historia de estos polifacéticos vehículos, lo suyo es hablar del Cushman Auto-Glide como el sucesor del Unibus, y considerarlo como el primer scooter americano. Desde aquí ya es fácil llegar a la Vespa MP6 de 1946. Y como se suele decir: el resto ya es historia.
Cushman es una de las empresas americanas más antiguas dedicadas a negocios relacionados con motores. Su nacimiento se remonta a 1903, cuando los hermanos Everett y Clinton Cushman fundaron la empresa en Licoln (Nebraska). Diez años después se pasaría a denominar Cushman Motor Works. Fabricaría su primer motor de cuatro tiempos en 1922, conocido popularmente como Husky (aunque no tiene nada que ver con Husqvarna), y fue ampliamente utilizado en bombas, cortacésped, barcos y un sin fin de máquinas agrícolas.
En 1934, John y Charles Ammon, quienes dirigían la Easy Manufacturing Company, se asociaron con Cushman. Un año después, llegó a la planta de montaje un joven que había fabricado un scooter a partir de un motor de lavadora. Buscaba recambios para él, pero lo que consiguió en verdad fue intrigar a Charles Ammon, quien tras ver su vehículo no tardo en encendérsele la bombilla.
En 1936, Cushman puso en la calle un motofurgón ligero que iba animado por el motor Husky de 4 CV. Fue muy utilizado en fábricas, servicio de correos y aeropuertos pues podía mover grandes volúmenes de carga (unos 165 kg).
Los primeros modelos llevan dos ruedas delante y una detrás, pero luego pensaron que si le daban la vuelta a una configuración tipo delta, una rueda delante y dos detrás, podrían llevar más carga. Y así fue, hasta 800 kg. Para que os hagáis una idea de su éxito, este motofurgón se sigue fabricando.
Con la experiencia adquirida, en 1937 se creó el Cushman Auto-Glide. Era un scooter básico y carente de ningún tipo de lujo. Muy americano. Un chasis de acero tipo U, un motor ubicado bajo el asiento, solamente un freno trasero accionado por pedal y sin suspensión (solo había muelles en el asiento). El motor era una versión con menos chicha del Husky, ya que con 222 cc daba 1,5 CV. A medida que pasaban los años, la evolución (y las ventas) fue vertiginosa.
La potencia del motor aumentó hasta los 2 CV, se lanzó una versión carenada (la que os mostramos en portada), había versiones con embrague centrífugo y otros con cajas de cambios de dos velocidades e incluso un sidecar.
Una de sus señas de identidad es el pedal de arranque, que en vez de estar montado en un lateral se ubica justo debajo del asiento, entre las piernas. Este fue el diseño básico con el que luego se perfeccionarían los citados Cushman 53 Airborne Scooter, surgidos unos años después. Cushman mantuvo su línea de producción de scooters Auto-Glide, introduciendo mejoras en motores, suspensiones, acabados, más versiones, etc.
En 1965, la empresa cesó su actividad en este segmento, dedicándose ya únicamente a vehículos de tres ruedas, carritos de golf y cortacésped. Unos años antes, en Bélgica, se construyeron algunos de ellos bajo la marca Belgian-Cushman, donde se había hecho con la licencia para Europa.
La foto de portada muestra un Cushman Auto-Glide de los primeros (1938), expuesto en el Volo Auto Museum de Illinois. La foto del modelo rojo es ya posterior, un Auto-Glide Model 52 fechado en 1945 y ya con suspensión delantera. Se trata de un ejemplar subastado por Mecum.
Ender
Japan Rules!!COMENTARIOS