Qué duda cabe que las motos también son importantes en los ejércitos desde que nacieron. Bien como correo, vigilancia o transporte rápido, tienen su utilidad en los cuerpos de defensa. La moto de hoy está basada en la Kawasaki KLR 650, pero convenientemente modificada para ser empleada en el cuerpo de Marines de Estados Unidos. Hay varias versiones, la M1030 es de 1991 y era de gasolina (MOGAS). Posteriormente se sustituyó por la M1030B1, con mayor potencia y un tanque de 6 galones. Y la que traemos hoy es el último modelo, la Kawasaki M103M1.
La moto de partida inició su andadura en 1987, cuando salió al mercado la primera versión. Era una moto robusta, una trail pero con mayor propensión al campo que a la carretera. Después de esta, sufrió varias modificaciones, realizando tres versiones posteriores. Entonces llegamos a 2003, cuando el ejército de Estados Unidos lanza un concurso para la adquisición de motocicletas para el cuerpo de Marines. Había una característica muy especial: las motos debían ser diésel.
Sí, como escucháis. Bueno, diésel de la gasolinera exactamente no, se trata de combustible JP-8, un derivado del queroseno con determinados aditivos, que se emplea como estándar en el ejército americano desde 1996, y que puede propulsar un avión de combate, un tanque o una moto. Por estas razones logísticas, se lanzó el concurso y Hayes Diversified Technologies lo ganó, realizando las modificaciones necesarias a la moto de origen.
Se cambió el cilindro, segmentos, válvulas y resto de piezas para que soportase la alta compresión de este tipo de motores, y pudiese funcionar con JP-8. En vez de los 38 CV de la moto de gasolina, rendía 30 CV y su respuesta al acelerador era muy lenta. También bajó la cilindrada, de los 651 cm3 originales a los 611 cm3 de la diésel. Pero a cambio disponía del doble de autonomía que la original a gasolina. Eso sí, no esperes suavidad. Las vibraciones que debe tener esta moto seguramente hará que tengas que visitar al dentista con frecuencia.
En cuanto a prestaciones, no esperéis grandes cosas: una velocidad máxima de 139 km/h es más que suficiente para escapar de los malos. Pero lo importante aquí es el consumo: unos 2,4 litros cada 100 km, gracias también a sus 167 kg de peso. Con sus 4,2 galones de tanque (también modificado) puede recorrer más de 600 km con un solo depósito, siempre que moderemos la velocidad.
Pero como es una moto para el ejército, debe ser dura como el adamantium, así que aparte de cambiarle la estética por una más propia del ejército, con su color verde o beige, y su camuflaje táctico, se han reforzado los neumáticos, las suspensiones, y la batería ahora es de tipo AGM, inmune a los derrames debido a su tecnología de fibra de vidrio absorbente. Una moto que está ciertamente cotizada en las subastas y puede alcanzar hoy en día un precio de 15.000 euros sin problemas.
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Pablo Mayo
Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches, y ahora también las motos. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.Me encanta está moto en Ebay las e visto por un precio de 10.000 dólares ,lo malo es conseguir el keroseno para que funcione
Recuerdo haber leído algo al respecto hace muchos años, sobre eso de que el ejército americano estaba analizando el uso de motociletas con motor diesel para desplazar pequeños grupos de soldados.
Daban entonces dos motivos para ello: mayor autonomía y menor variedad de combustibles para el tema logístico, a parte de que tal vez en caso de problemas de abastecimiento una vez en batalla, se podía usar el diesel de los camiones enemigos.
Escuchando este vídeo, no puede negarse que al ralentí canta bien lo que es, pero una vez acelerado, disimula bastante su naturaleza
https://www.youtube.com/watch?v=8Z830kXJr7ADesde luego suena fatal al ralentí. Podrían haber elegido al menos una bicilíndrica, para mejorar las vibraciones, que no creo que sean nada buenas a largo plazo.