La Honda Rebel 2020 es una moto diferente, a la cual es difícil encontrar rivales. Desarrollada como una alternativa a las típicas cruiser americanas, podría asemejarse a la gama de acceso de Harley-Davidson, pero tampoco está pensada para competir con ella directamente. Ni por motor ni por filosofía es “la típica custom” sino una moto perfecta para aquellos que quieren empezar con el A2 y buscan una montura amable, sencilla pero con estilo.
Tenemos que remontarnos nada menos que a 1985 para encontrar los antepasados de esta montura, en forma de la Honda CMX 250 Rebel. Lo cierto es que el actual modelo también mantiene las siglas CMX 500, pero al ser la única versión que se comercializa en Europa, no hay lugar para confusiones. La versión actual nacía en 2012 y, tras todos estos años en el mercado, ha sido revisada de cara a la entrada de la Euro 5 en 2020, puliendo algunos detalles. De ellos te hablamos a finales del año pasado, momento en el que fue dada a conocer la Honda Rebel 2020.
El motor sigue siendo prácticamente el mismo, más allá de la pertinente puesta a punto a nivel de emisiones. Son 46 CV extraídos de un bicilíndrico de 471 cc con buen empuje a bajas vueltas. El chasis tubular recuerda en cierta manera al de la Honda VTR 250, y visualmente se reconoce por su marcada joroba a la altura del depósito. El asiento por otro lado está muy bajo, con un aspecto claramente bobber en su parte trasera, gracias al corto recorrido de suspensiones en contraposición del neumático delantero de ancho perfil.
En su renovación, la Honda Rebel 2020 recibe un nuevo embrague antirrebote que, además de evitar los bloqueos del tren trasero en reducciones, ayuda también a que el esfuerzo que tenemos que hacer sobre la maneta sea un 30% menor. De esta forma y un uso intensivo en recorridos urbanos, notaremos menos fatiga en nuestra mano izquierda. Luego ya en carretera, el nuevo tarado de los muelles de la horquilla unido a un volumen de aceite revisado, mejora el confort y la suavidad de marcha.
Tras el nuevo faro LED de tamaño compacto (175 mm), se esconde una instrumentación en LCED negativo con retroiluminación blanca y de solamente 100 mm de diámetro. Como novedad, incorpora indicador de la marcha engranada y monitor de consumo de gasolina. Detrás, el piloto de iluminación también es nuevo y ahora presenta una forma ovalada. Y si os lo estáis preguntando, efectivamente el soporte del faro delantero es de aluminio.
Con un peso reducido (190 kg), un motor que invita a aprovechar su empuje, un asiento bajo y una ergonomía perfecta, la Honda Rebel 2020 es una moto ideal para usar todos los días tanto por ciudad como por carretera. No se le atragantan los largos viajes y, además en claramente personalizable aunque ya de serie luce un aspecto “blacked out” en el que se apuesta todo al negro y nada a los cromados. Se puede usar en solitario o en compañía, pudiendo transformarse en una u otra con solamente dos tornillos.
Hay además un buen número de accesorios oficial (parrilla trasera, respaldo, protectores de depósito y visera del cuadro) e incluso unas nuevas maletas en nylon o cuero, a elegir dependiendo de nuestros gustos.
Pero para aquellos que quieren una moto personalizada ya de fábrica, está disponible también una nueva Honda Rebel S 2020 con accesorios montados de fábrica: carenado del faro con pantalla ahumada, tapas y fuelles de horquilla estilo retro y un asiento especial con costuras estilo diamante.
La Honda Rebel 2020 está disponible desde este mismo mes de mayo a un precio de 6.500 euros y en cuatro colores: Negro Graphite, Gris Axis Mate Metalizado, Rojo Milennium y un nuevo Azul Jeans Mate Metalizado. Por su parte la Honda Rebel S 2020, con el kit de accesorios de serie, cuesta 6.850 euros y solo está disponible en el Gris Axis Mate Metalizado.
Ender
Japan Rules!!COMENTARIOS