La Benelli 899 Tre-K –o Tre-K 899, como también se la llama– se presentó en el EICMA de 2008 como una “versión pequeña” de la Tre-K 1130. Como su propia denominación indica, tenía un motor con meons cuibicaje y, obviamente, con menos potencia, aunque todo lo demás se mantenía intacto.

Benelli fue adquirida en 2005 por la compañía china Qianjiang, integrada en el conglomerado de Geely Holding, quienes empezaron a ingresar dividendos para que la firma italiana volviera a estar en lo más alto. Y durante algunos lo lograron, con modelos, precisamente, como la Tre-K, una motocicleta que hoy estaría considerada como una trail asfáltica pero que, en realidad, tiene una mezcla de trail y de naked, aderezada con un diseño de lo más personal.

Ciertamente, el diseño es uno de los apartados que más detacaron en los modelos de Benelli durante algunos años; la Benelli Tornado Tre, la Benelli TnT 1130, la propia Tre-K… Diseños bastante alejados de lo que ofrecen hoy, que según el modelo, es demasiado chino. El cambio de rumbo impuesto en la marca es notable y, al parecer, más acertado, pues las ventas van mucho mejor que a comienzos del Siglo XXI.

Sin embargo, las motos actuales de Benelli no tienen la enorme personalidad de la 899 Tre-K, ni tampoco sus prestaciones. Con tres cilindros, 899 centímetros cúbicos, culata de cuatro válvulas por cilindro, inyección… Y una carrera supercorta de los pistones –unos escasos 49,2 milímetros–, el motor de la Tre-K 899 rendía 108 CV a 8.500 revoluciones y 88 Nm a 8.500 revoluciones. Era un motor poderoso, que según las pruebas de la época, tenía un consumo bastante contenido. Fallaba en el refinamiento y en la suavidad en la entrega de potencia, lo que reforzaba su personalidad, pero la hacía incómoda para muchos usuarios.

El chasis se tomaba, directamente, de la Tre-K 1130, un entramado tubular con elementos de fundición, con una distancia entre ejes de 1.515 milímetros, completado por una horquilla con unas espectaculares barras de 50 milímetros y frenos delanteros de cuatro pistones. El amortiguador trasero, al igual que la horquilla, era regulable.

Las dimensiones de la moto no eran excesivas, aunque tampoco era una moto pequeña. Pesaba 240 kilos en orden de marcha y el asiento estaba a 840 milímetros del suelo, así que, tanto por potencia como por peso y altura del asiento, no era una motocicleta para novatos. Sin embargo, las pruebas hablan de una moto mucho más agradable de pilotar que su hermana mayor, la cual era mucho más agresiva en la entrega de potencia y no siempre era agradable de conducir.