Un siglo conmemora el modelo que hoy os traemos hasta espíritu RACER, desde el nacimiento de una de las motocicletas con más solera de la historia de las dos ruedas: la Brough Superior SS 100 original. Para celebrarlo Mark Upham, el nuevo propietario de la marca desde 2008, y que compró los derechos de esta para hacerla resucitar, hizo un encargo muy especial al fabricante francés Boxer Bikes. Este es conocido por colaborar en la creación de motocicletas muy especiales para marcas como Lamborghini, hoy de diseñar y fabricar nuevamente una SS 100.

Así que Thierry Hanriette, cofundador de la marca gala, tenía unas directrices muy claras a seguir por parte de Upham. La nueva SS 100 debía ser una motocicleta totalmente nueva e innovadora en todos los aspectos, como lo era antaño la original, pero manteniendo el toque y acabado final de las Brough Superior, que tan reputado nombre se ganó en su época casi 100 años atrás, conociéndose como “las Rolls-Royce de dos ruedas”.

En 2013 se presenta en el salón de Milán el primer modelo de la nueva SS 100 y un año después se puso en venta al público. Seis años después, y sobre la base de esta, se crea nuestro modelo de hoy, la Brough Superior Anniversary, una motocicleta que pareciera haber salido de algún taller de orfebrería por la calidad de cada uno de los detalles que la componen.

La Brough Superior Anniversary es tan exclusiva como personal. Todo en ella está diseñado para no dejar indiferente a nadie, desde su sistema de frenado y horquilla delantera hasta por la cantidad de piezas fabricadas a partir de bloques macizos de aluminio.

Con esta versión la nueva Brough ha buscado conmemorar por todo lo alto el nacimiento de tan exclusiva motocicleta, pero haciéndolo como antaño, de una manera totalmente artesanal, incluso fabricando algunos de sus componentes en los talleres de Boxer Bikes en Toulouse (Francia), lugar donde se han montado todas y cada una de las 100 unidades que componen esta serie tan especial.

El propulsor es de manufactura propia, un V-Twin a 88º refrigerado por agua con cuatro válvulas por cilindro. Con unas cotas internas de 94×71,8 mm (997 cc) es capaz de desarrollar 102 CV de potencia a 9.600 RPM, situando su par máximo en 87 Nm a 7.300 vueltas. Su homologación es Euro 4 y va asociado a un cambio de seis velocidades.

Pero si en algo destaca este modelo, además de visualmente, es por la calidad de sus componentes. Con un chasis y bastidor fabricado en titanio, o una gran cantidad de piezas fabricadas a partir de bloques de aluminio, como lo son su tija, tapas de motor o parte inferior de su depósito a dos colores. Evidentemente, nada se ha dejado escapar en una motocicleta tan exclusiva a la par que exótica.

Buena cuenta de ello lo dan su colín monoplaza o sus cuatro salidas de escape estilo “bocina” emergiendo desde los dos cilindros y rematados en su parte final de manera oblicua. También sus llantas de 18 pulgadas de cinco brazos en aluminio forjado, son únicas e irrepetibles, calzadas con neumáticos 120/70 R18 delante y 160/60 R18 detrás.

Tecnológicamente hablando, esta nueva reedición de la legendaria SS 100 también demuestra que todo ha sido estudiado concienzudamente para ofrecer una moto diferente y con un toque especial.

Así lo demuestran tanto su sistema de frenado, con cuatro discos delanteros de 230 mm con pinzas radiales Beringer de cuatro pistones, como su horquilla. Usando el modelo diseñado y patentado por Claude Fior, que ya te contamos en nuestro artículo sobre la Boxer Bikes BA 737, es capaz de modificar las cotas del chasis o el ángulo de esta, adaptándose al piloto en cada momento.

La marca anuncia un peso de 186 kilogramos en seco con un reparto de pesos 50/50, siendo la distancia entre ejes de 1.540 mm y la altura del asiento de 820 mm, aunque como ya hemos comentado, estos parámetros son variables si se desea. ajustándolos desde el sistema de suspensión delantero.

Realmente Brough Superior con esta versión ha buscado más la creación de una pieza de coleccionista que el mero hecho en sí de construir una motocicleta para rutear los domingos. Su precio sea quizás el que más justifique esta teoría propia.

Si ya de por sí la SS 100 “básica” era terriblemente cara y al alcance de muy pocos, con una tarifa de 65.000 euros, esta Anniversary, con sus 100.000 euros de salida, la hace una utopía para la mayoría de los mortales. Lo que está claro es que el número 100 es marca y seña del modelo, y que sin duda quedará para el recuerdo como la secuela perfecta de aquellas SS 100 del siglo pasado, manteniendo la misma filosofía y exclusividad que estas.

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