La Ducati 851 fue un modelo que marcó un antes y un después en la casa de Bolonia. Fue presentada en 1987 y era el primer modelo completamente nuevo de la compañía diseñado tras la adquisición de Cagiva dos años antes. Con esta moto las intenciones de Ducati fueron claras desde el principio: hacer una superbike apta para carretera -Strada- o directamente enfocada a circuito -Kit-.
Con la intención de ingresar en el campeonato del mundo de Superbikes de 1988, Ducati tenía la obligación de construir 200 ejemplares. La rápida evolución de las motocicletas de carreras había sido impulsada por una serie de factores, quizás ninguno más importante que la batalla entre las marcas japonesas y europeas por la supremacía sobre la pista. ¿La consecuencia? Un incremento exponencial de las ventas de motos prestacionales.
Massimo Bordi, ingeniero de Ducati, había diseñado un motor desmodrómico de cuatro válvulas para su tesis en la Universidad de Bolonia en 1973. Para la Ducati 851 desempolvaría esos diseños como punto de partida. El entonces consultor técnico de la marca, Fabio Taglioni, estaba en contra de esta elección, habiendo propuesto la adopción de un motor de configuración V4 para la nueva máquina. Pero los resultados de la prueba demostraron que Bordi tenía razón.
El primer prototipo de Desmoquattro se hizo con la colaboración de Cosworth sobre la base de una Ducati 750 F1
La principal innovación aportada al motor fue la introducción de la nueva culata y los cilindros en la base del Ducati 750 F1 anterior. Empleaba el chasis Trellis tradicional de la marca, unido a unos frenos Brembo y una suspensión Marzocchi. Las primeras unidades fueron criticadas por su manejo, por lo que se cambió amplió el diámetro de la rueda delantera de 16 a 17 pulgadas y se afinó aún más la suspensión.
Sin embargo, el motor V-Twin a 90 grados era fuerte y ganó muchos adeptos, particularmente por su respuesta precisa al toque acelerador y amplia distribución de potencia y par. El resultado eran 102 CV a 9.000 RPM y 71,2 Nm de par a 7.250 RPM. Con un peso en seco de 185 kilos, podía alcanzar los 240 km/h de velocidad punta. En su momento, era la Ducati más rápida y potente que había visto el mundo.
Tan rápida y tan potente que ganó la primera carrera del Campeonato Mundial de Superbikes en 1988 en Donington Park, con Marco Lucchinelli a los mandos. La Ducati 851 en Italia en 1988 y 1989, con el Campeonato Italiano de Superbikes de este último año bajo el brazo. En Inglaterra se llevó otro título ese mismo año, así como una serie de victorias en Campeonato Mundial de la disciplina, que culminó con el título del título mundial en 1990.
De alguna manera, la Ducati 851 fue la moto que llevó a la compañía a la era moderna. Por ello es una máquina muy respetada dentro de la comunidad motera y un ejemplar que merece estar entre nuestras moto del día con espíritu RACER.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS