Moto del día: Kawasaki ZL1000 Eliminator

Moto del día: Kawasaki ZL1000 Eliminator

La custom con motor de Superbike de los 80 y 110 CV


Tiempo de lectura: 2 min.

El segmento custom/cruiser americano siempre resulta de lo más interesante para los fabricantes, pues aglutina una gran cantidad de ventas al otro lado del charco o, al menos, así ocurría allá por los años 80, cuando los japoneses empezaron a ofrecer propuestas serias para el segmento, como la Suzuki VS 1400 Intruder, por ejemplo, que llegó tras varios intentos con otras versiones, como la VS 750 Intruder de 1986.

Dicho año, 1986, también fue el elegido por Kawasaki para adentrarse en aquel mercado, aunque lo hizo como suelen hacerlo los de verde, con un marcado talante deportivo. Incluso se inventaron un eslogan con algo de gancho: The quickest way to brear away from the crowd, que se podría traducir como “la forma más rápida de romper con la multitud”. Las cruiser y las custom son motos con las que se busca precisamente eso, no ser como lo demás, y para ello, son ampliamente modificadas.

Si regresamos a 1986 y nos centramos en el lanzamiento de la firma japonesa, nos encontramos con la Kawasaki ZL900 Eliminator, una custom de lo más atípico, aunque “muy Kawasaki”, equipada con el motor de la GPZ 900 R. No se montó tal cual, se adaptó para las nuevas exigencias –se bajo compresión, se cambiaron los carburadores y entre otras cosas, se modificó el sistema de gestión electrónica–, pero todavía presumía de 105 CV y 85,3 Nm de par. Hablamos de una motocicleta custom, con un motor de cuatro cilindros de 908 centímetros cúbicos y 105 CV, puesta en circulación a mediados de los años 80…

La Eliminator 900 solo se mantuvo en el mercado dos años, entre 1986 y 1987, momento en el cual, apareció la Kawasaki ZL1000 Eliminator. Seguro que ya habrás pensado en ello: el mayor cambio seguro que tiene que ver con el motor, que se hace más grande y más potente. Y efectivamente, así fue, se optó por incorporar el bloque de cuatro cilindros que daba vida a la Kawasaki GPZ 1000 RX, el cual, también se modificó ligeramente para la ocasión, pues las aspiraciones de una motocicleta como esta no necesitan de 125 CV. No obstante, las cifras todavía eran de escándalo para una custom de aquellos años, pues hablamos de una potencia de 110 CV a 9.000 revoluciones, un 0 a 100 km/h en cuatro segundos y una velocidad máxima de 211 km/h.

Aunque la moto tuvo una buena acogida, también estuvo en el mercado un par de años, entre 1987 y 1988.

COMPARTE
Sobre mí

Javi Martín

Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches, y ahora también las motos. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.

Miguel Sánchez

Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.

Ángel Arias

La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.