Moto del día: Duati Monster S4R S

Moto del día: Duati Monster S4R S

Con el motor Testastretta, era la Monster más potente y deportiva


Tiempo de lectura: 3 min.

La Ducati Monster S4R S representaba el máximo exponente del monstruo italiano allá por sus inicios. Era la versión más deportiva y se notaba con solo mirarla, pues parecía que alguien había recurrido al catálogo de accesorios y había equipado su moto hasta arriba.

Todo el mundo sabe que la Ducati Monster es un modelo importante, sobre todo para la propia Ducati. Aparecida en 1993, la Monster permitió que la firma italiana tuvieran buenos ingresos después de una mala racha –los años 80 no fueron buenos para la industria de la moto europea–, y el modelo llegó a cobrar una importancia en la marca vital. Sirva como ejemplo que en 2005, las ventas de la Monster representaban más de la mitad del total de ventas de la marca.

La importancia y la popularidad del modelo se empezó a notar cuando, poco a poco, la gama se llenó de versiones y la Monster empezó a ganar potencia y presencia. El máximo exponente, o casi, llegó con la Ducati Monster S4R Testastretta, una evolución de la S4R que ya había en el catálogo, que como su denominación indica, presumía de contar con el motor Testastretta.

Según se dijo en su momento, la Monster S4R Testastretta establecía un nuevo estándar en la categoría, gracias, entre otras cosas, al carácter general de la moto y a las prestaciones. No debemos olvidar que el dos cilindros que servía de corazón procedía de la Superbike de la marca, de la Ducati 999. La primera Monster S4R S tenía el motor de la Ducati 998, el Desmoquatro, que rendía algo menos de potencia.

La Ducati Monster S4R S –su denominación oficial– era la Monster más potente en aquel momento, finales de 2006 y comienzos de 2007, la más potente y la más deportiva. El motor, un dos cilindros con distribución desmodrómica característica de la marca, rendía 130 CV a 9.500 revoluciones y un par nada desdeñable de 103,9 Nm a 7.500 revoluciones. Se redujo ligeramente la potencia con respecto a la Ducati 999, pero el talante de la moto era diferente y se buscó una mayor elasticidad y mayor cifra de par.

Equipada hasta arriba, con suspensiones Öhlins multirregulables –la horquilla con barras de 43 milímetros–, frenos Brembo “oro” con pinza delantera de cuatro pistones, algunos componentes de fibra de carbono –como el guardabarros delantero o los silenciadores– que se podían montar de forma opcional, llantas de aleación superligeras… Era la máxima expresión de la Monster.

Merece la pena recordar que la Ducati Monster S4R Desmoquadro –usemos el nombre del motor para diferenciarlas– fue la primera Monster con motor refrigerado por líquido y la S4R Testastretta era su evolución lógica. La primera, como hemos comentado antes, usaba el motor de la mítica Ducati 998 con 117 CV, la segunda, hacía uso del motor de la Ducati 999 con 130 CV.

La Ducati Monster S4R S fue un modelo bastante efímero. Solo se comercializó durante dos años y se vio a acompañada por una versión “normal”, cuya única diferencia, además de la ausencia de la última “S” en el nombre, era el cambio de suspensiones, que pasaban a ser Showa, y que algunos elementos de aluminio se pintaban de color negro –basculante, tijas, soporte de estriberas… –.

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Javi Martín

Con 20 años no ponía ni una sola tilde y llegaba a cometer faltas como escribir 'hiba'. Algo digno de que me cortaran los dedos. Hoy, me gano un sueldo como redactor. ¡Las vueltas que da la vida! Si me vieran mis profesores del colegio o del instituto, la charla sería de órdago.

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Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches, y ahora también las motos. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

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