La Ducati Streetfighter 848 fue presentada en 2012 para tapar un agujero en su línea de productos. La compañía se había encontrado en la envidiable posición de haber creado una streetbike naked, la Streetfighter 1098, que era realmente demasiado potente para la comodidad y la seguridad de la mayoría de los usuarios. ¿La solución? Domesticar un poco a la bestia.

La Ducati Streetfighter 848 se impulsa gracias a su corazón Testastretta, conservando gran parte del rendimiento de su predecesora con una mejor respuesta y mejor manejo gracias a geometría del chasis que lo hacen más apropiado para las calles de la ciudad, pero aún lejos de ser una moto realmente práctica. Fue una moto con una vida corta, y fue eliminada del catálogo de Ducati en 2015, ya que se superponía con otros modelos de la compañía.

La familia Streetfighter siempre ha sido una mezcla de provocación y elegancia, y este miembro de la familia es una bellota que no cayó lejos del árbol. Para ser justos, la Ducati Steetfighter 848 no es tan agresiva como su predecesora inmediata. Permite una posición ligeramente más vertical, pero sigue siendo una superbike sin carenado con el objetivo puesto en la pista, algo de lo que se dará cuenta hasta el ojo menos experimentado.

Unas líneas que hacen honor a su nombre y una pequeña pantalla para hacer de cuadro de instrumentos hacen que la Ducati Streetfighter 848 se vea limpia y bien planificada

Minimalista, casi en su defecto, la Ducati Steetfighter 848 lleva solo aquello que necesita para cumplir su misión, lo que viene a ser una 0% en grasas. Una línea superior bastante abrupta comienza en unos faros muy afilados, desplazándose cuesta arriba a través del depósito de combustible de 16,5 litros antes de una caída precipitada en el asiento. Finalmente, la cintura vuelve a ascender hacia la zaga, dejando a la Streetfighter 848 como un velocista agazapado.

Las barras del chasis expuestas siempre agregan cierto estilo callejero, y la fábrica se asegura de no pasar por alto los huesos de la Streetfighter 848 con un abrigo. Después de todo, uno nunca debe ser demasiado sutil para su audiencia. El marco se compone de miembros tubulares extruidos de ALS 450, una aleación de acero inoxidable conocida por su elasticidad, durabilidad y resistencia a la corrosión. Un basculante de aluminio completa la estructura ósea y mantiene el peso no suspendido a raya sobre la rueda trasera.

Un juego de horquillas Marzocchi de 43 mm completamente ajustable con precarga variable viene de serie, así como amortiguación de compresión y rebote, al igual que el monoamortiguador Sachs en la parte posterior. Los componentes de la suspensión en ambos ejes proporcionan un recorrido de 127 mm. Con la idea de obtener un conjunto lo más ligero posible –169 kg en seco–, la fábrica de Bolonia equipó a la Streetfighter 848 con llantas ligeras de aleación de 17 pulgadas, enrasadas sobre neumáticos Pirelli Diablo Rosso Corsa.

Con unas gomas de medida 120/70 en la delantera y 180/60 en la trasera, tienen un tamaño similar al de los usados ​​en el Campeonato del Mundo de Superbikes. Brembo suministra los frenos. Un par de pinzas de cuatro pistones pellizcan los discos delanteros dobles de 320 mm, y una pinza de dos pistones une el disco posterior de 245 mm. Si estás buscando ABS, malas noticias: la Ducati Streetfighter 848 no tiene sistema de antibloqueo de frenos. Eso sí, brindan una sensación honesta que mejora la conexión entre el usuario y la máquina.

La Ducati Streetfighter 848 funciona con el motor Testastretta optimizado para proporcionar una suavidad óptima en la calle y amplio rango de potencia utilizable. El sistema distribución desmodrómica, firma de Ducati, gestiona las culatas de cuatro válvulas y el enfriamiento por líquido se encarga del disipar el calor residual. El motor es lo que los estadounidenses llamarían un V-twin de 90 grados, y funciona con un diámetro de 94 mm y una carrera de 61,2 mm para un desplazamiento real de 849 cm³, y una relación de compresión de 13,2 a 1, bastante alta.

La potencia total es de 132 CV a 10.000 RPM y 93,5 Nm de par motor a 9.500 RPM, capaz de cubrir el cuarto de milla en 11 segundos. A pesar de que es más segura que la 1098, la Streetfighter 848 sigue siendo una completa locura de moto. Ducati ajustó su control de tracción de ocho niveles (DTC) para ayudar a los pilotos a mantener el control de toda esa potencia. El nivel de intervención está determinado por el modo de usuario DTC preestablecido, y su entrada en acción es perfecta y casi imperceptible a través de asiento.

Una transmisión de seis velocidades por cadena hace la conexión final a la rueda trasera y, sorprendentemente, con un embrague convencional. Décadas de experiencia combinadas con una inversión constante en materiales avanzados hicieron que el primer intervalo de servicio se estableciese en 24.000 kilómetros. Con un precio de partida de 13.912 euros en 2012, era una gran opción a tener en cuenta si querías una moto válida para convivir en el día a día y permitirte un poco de disfrute con espíritu RACER.