Si me pongo a pensar en una maxinaked o una hypernaked, o como queramos definir este concepto, pero teniendo en mente la idea de una moto sin carenado que tengan un propulsor que nos quite el aliento y que haga que nuestra cabeza quiera salir disparada de nuestro cuerpo debido a la ausencia total o parcial de carenado, me viene a la cabeza entre otros modelos la protagonista de hoy, la Kawasaki ZRX 1200 R.

Bien es cierto que la marca comercializó esta moto en tres versiones, la Kawasaki ZRX 1200 “a secas”, la versión que menos tiempo estuvo a la venta (imagen superior) y que tenía un faro redondo tradicional, la ZRX 1200 S con semicarenado, y la que mas éxito cosechó, la ZRX 1200 R con un faro cuadrado y una pequeña cúpula que nos transportaba a tiempos pasados en los que Eddie Lawson ganaba con Kawasaki los campeonatos AMA de velocidad.

Siéndoos sincero, cuando esta moto estaba a la venta y aparecía en las páginas de las revistas del sector, en alguna prueba o alguna comparativa me horrorizaba ese faro cuadrado de estética retro. Con los años, leyendo sobre motos antiguas de la marca e informándome de viejos hierros de incluso otras firmas, ese feo modelo de mi juventud ha ido cambiando de perspectiva en mi cabeza, y sinceramente si a día de hoy la vendiesen así en España, sería una firme candidata a la hora de cambiar de moto, ya que lo que en su día me pareció un horroroso patito feo, hoy me parece de lo mas llamativo. Cosas de ser viejoven, supongo.

Dejando a un lado las opiniones subjetivas y personales acerca de su estética en las que cada uno tendrá una opinión diferente, pasamos a hablar de la historia del modelo y sus características.

ZRX 1200 R (2003)

Esta Kawasaki estuvo a la venta en el mercado español con ligeras evoluciones desde el año 2001 hasta el 2007, aunque en Japón se estuvo vendiendo hasta el año 2016 con una actualización que le daba una imagen mucho mas actual, cambios sutiles pero que funcionaban –nuevas llantas, frenada, iluminación y alimentación mediante inyección- aquí dejó de venderse por sus bajas ventas. Salió al mercado como una evolución del concepto estrenado tiempo antes con la Zephyr, se trata de un modelo musculoso de patada agresiva que estrenaba una evolución del motor de la deportiva ZZR 1100.

Se ve que a los de Kobe el propulsor se les quedaba pequeño y decidieron aumentar la cilindrada de los 1.052 cc hasta los 1.164 cc aumentando el tamaño de los pistones y modificando a su vez la carrera; dando como resultado un motor de cuatro cilindros en línea, con refrigeración líquida y doble árbol de levas en cabeza -DOHC- que ofrecía una potencia de 122 CV a 8.500 RPM y 112 Nm de par a 7.000 RPM. Se encuentra alimentado por cuatro sedientos carburadores Keihin de 36 mm y va unido a una caja de cambios de cinco velocidades de funcionamiento algo lento y tosco para los estándares actuales, que denotan que es una moto desarrollada hace ya casi 20 años.

El chasis del modelo es de tipo doble cuna tubular de acero y va unido a un basculante también de diseño doble, realizado a partir de tubos que en este caso son de aluminio. La suspensión trasera, de estilo tradicional, monta dos amortiguadores laterales regulables en extensión y precarga con un recorrido de 123 mm, y la suspensión delantera se encuentra a cargo de una horquilla telescópica convencional con barras de 43 mm regulable en precarga, con un recorrido de 120 mm.

ZRX 1200 R (2006)

Para la frenada se confía en dos discos delanteros de 310 mm mordidos por pinzas de 6 pistones opuestos muy efectivas; en el eje posterior tiene un único disco de 250 mm con pinza de doble pistón opuesto. Las dimensiones de las llantas y tamaño de neumáticos si se adaptan a los cánones actuales, teniendo un diámetro de 17 pulgadas en ambos ejes y unas medidas de 120/70 para el neumático delantero y 180/50 para el neumático trasero.

La altura del asiento se encuentra a 790 mm del suelo, lo que no perjudicará a que lleguemos bien a pisar con los dos pies en parado aunque no seamos muy altos. Sus dimensiones eso sí, son generosas, con un largo de 2.120 mm y una distancia entre ejes de 1.465 mm; su peso es de de 224 kg en seco, aproximadamente unos 240 kg con todos los fluidos, por lo que no es una moto para manos inexpertas tanto por potencia como por peso.

En cuanto a la disposición de los mandos, encontramos como era habitual en las motos de la época una doble esfera analógica tras su característica cúpula baja. La esfera izquierda está dedicada al velocímetro, en su interior también hay un tradicional cuenta kilómetros analógico en la parte superior y un parcial reseteable mediante ruleta en la parte inferior. La esfera derecha es un convencional tacómetro de fácil lectura con dos testigos en su parte baja, el izquierdo nos alerta de un alto nivel de temperatura del motor y el derecho de un bajo nivel de aceite.

ZRX 1200 R Special Edition (2016)

Entre ambas esferas encontramos también un indicador analógico de aguja para el nivel de gasolina, y para terminar con los indicadores bajo las esferas encontramos 4 testigos, dos para indicarnos el accionamiento de los intermitentes, uno para informar de la posición del cambio en punto muerto y el último para indicar el accionamiento de las luces de carretera. Tened en cuenta que la imagen superior corresponde a la última versión, ya con indicadores digitales.

La ergonomía del modelo aunque tenga un manillar estándar a una altura no muy baja, nos obliga a ir con los brazos bastante estirados debido al largo depósito de combustible de 19 litros.

La fiabilidad del modelo es notable, y la calidad de sus componentes es buena

Aguantan bastante bien el paso de los años si somos cuidadosos; principalmente debido a su esquema de moto sencilla y funcional, con un motor de alta cilindrada que no se encuentra excesivamente apretado. El precio en el mercado de segunda mano es bajo, te costará encontrarla en portales de compraventa de segunda mano -aunque sean especializados- debido al bajo volumen de ventas del modelo en nuestro país, sobre todo si lo comparamos con sus primas niponas como pueden ser la Honda CB 1300 o la Yamaha XJR 1300. Sin duda es una moto que en su día no fui el único que no supo valorar.