En la actualidad las motos retro están de moda, y BMW lo sabe. Es por eso que no han querido dejar escapar la ocasión para reeditar uno de sus clásicos más simbólicos: la BMW R 80 G/S, posiblemente la primera trail de la historia, y el génesis de esas siglas tan famosas: Gelande/Strasse (tierra/calle). La BMW R nineT Urban G/S es la moto que ha escogido la firma bávara para conmemorar a la tatarabuela de las GS.
El apellido del modelo ya nos lo dice todo: nineT. Estamos ante la gama Heritage de BMW, una maniobra comercial muy inteligente por parte de la firma bávara. Sobre una misma base mecánica, que técnicamente está más que amortizada, cambian la parte más externa de la moto con diferentes complementos estéticos, para conseguir los distintos sabores añejos que se ofrecen en el catálogo.
La BMW R nineT Racer, por ejemplo, se inspira en las café racer de los años 70, mientras que la BMW nineT Urban G/S coge esa imagen de trail sencilla y minimalista de los años 80. Los guiños estéticos a la G/S original son constantes. El foco delantero redondo con una careta simple rodeándolo, la horquilla con fuelles o las llantas de radios, que no tienen el resto de las nineT, o el asiento plano en color naranja así como el bóxer bicilíndrico, también son guiños a su antecesora. Donde me cuesta encontrar parecidos entre ambas es en la zona del colín, parte en la que la BMW nineT Urban G/S demuestra una personalidad propia.
Mecánicamente la moto emplea el motor bóxer de 1.170 cm3 refrigerado por aire de la casa bávara; un propulsor conocido por todos y que los alemanes empezaron a usar en 2004. Eroga los 110 CV de siempre, y sus principales virtudes son una vida muy longeva, un consumo de combustible reducido, y una gran respuesta en todo el régimen de revoluciones.
Si atendemos a la parte ciclo es donde vemos que pese a lo que nos pueda decir su nombre, no estamos ante una auténtica trail. La ausencia de carenado y protección aerodinámica se la podíamos perdonar, puesto que las trail en sus orígenes también carecían de ello.
El problema son las suspensiones, con 125 y 140 milímetros de recorrido en el eje anterior y posterior respectivamente. Con esa distancia entre topes es bastante complicado practicar una conducción offroad fuerte. Al menos el modelo viene equipado con neumáticos de tacos y llanta de radios de 19 pulgadas en el tren delantero, por lo que puedes usarla para circular por caminos y pistas, siempre que no estén muy rotas.
Me llama la atención su distancia entre ejes de 1.527 mm, mucho más que la BMW R 1250 GS actual, que destaca entre otras cosas por mantener esta cota mucho más reducida, lo cual redunda en una mayor agilidad y maniobrabilidad en espacios reducidos.
Es por estos motivos que, aunque los alemanes quieran venderla como una G/S, realmente estamos ante una moto scrambler. Curiosamente la casa bávara también vende la BMW R nineT Scrambler, una moto muy parecida en casi todos los aspectos menos en el estético.
La BMW R nineT Urban G/S hay que entenderla como lo que es, un ejercicio de diseño o un complemento de moda, pero quien se la quiera comprar como una herramienta de gran calidad para conseguir un fin determinado se va a llevar una decepción.
Me explico: quien adquiere una BMW R 1250 RT sabe que se está comprando una moto buenísima para viajar, una touring de manual, vaya. Quien se compra una BMW R 1250 GS sabe que se está comprando una de las mejores trail del mercado, y que podría darse dos o tres vueltas al mundo consecutivas con ella.
Quien se compra la BMW S 1000 RR sabe que tiene una de las superdeportivas más rápidas de la actualidad. El problema es para el que se compra una BMW R nineT Urban G/S, ya que realidad está pagando por una moto que queda bonita en las fotos, un pedacito de nostalgia, un guiño a los años 80, y ya.
Y ese es el principal problema que le veo a esta moto, y a toda la gama nineT en general. Son motos escaparate, motos galería, motos para lucir en las fotos de Instagram; pero que no tienen una utilidad real definida. El precio de este de ejercicio de diseño al menos no es elevado y la parte positiva es que puedes acceder a la auténtica experiencia BMW Motorrad -motor bóxer y cardán- por 14.200 euros.
Gonzalo Lara Camarón
Ingeniero de software a tiempo completo y apasionado del motor en mis ratos libres. Los coches me gustan desde que tengo memoria, pero fue descubrir las motos y la “enfermedad” fue a peor. Mi sueño es recorrer todos los rincones del mundo sobre dos ruedas.COMENTARIOS